Barceló conmina al empresariado a invertir para ser competitivo

Tras remarcar la importancia del turismo como "primer motor económico de la Isla" y la necesidad de "propuestas atrevidas para mostrarnos al mundo como somos", Guillem Ferrer, director de COPE Menorca, dio paso a Barceló. Estando entre conocidos, la actual consellera de Turismo y Trabajo y ex presidenta del Consell, se mostró realista en el diagnóstico y expeditiva en el tratamiento, valga el símil médico.

Por lo que se refiere al análisis de la situación, Barceló reconoció que la industria turística menorquina había perdido fuelle desde 2005, lo que se había traducido en pérdida de visitantes y, por consiguiente, descenso en la ocupación hotelera y en el gasto turístico. Sin embargo, su "increíble impacto", según apuntó la consellera supone el 42,6 por cien del Producto Interior Bruto de la Isla y el 29,4 por cien de incidencia en el mercado laboral, exige un esfuerzo habida cuenta su "capacidad para generar riqueza, renta y bienestar".

Barceló se refirió a la cooperación entre sectores económicos e instituciones como elemento clave en el "reposicionamiento de la industria turística menorquina", un objetivo para el que recomendó centrarse en "líneas atractivas, singulares y diferentes respecto de nuestras propuestas turísticas" y "ser más competitivos". La fórmula permitiría, a juicio de la consellera, aprovechar "el punto de inflexión" que han experimentado los indicadores de coyuntura (llegadas, gasto y ocupación) por mor de los instrumentos de promoción articulados entre sector y poderes públicos, entre ellos los convenios con los touroperadores, los acuerdos con compañías aéreas o el uso de nuevas tecnologías.

En este punto, la consellera se refirió, asimismo, a la necesidad de trabajar en los contenidos de la promoción, superando los conceptos genéricos en los que se ha basado tradicionalmente- Mallorca y sol y playa- de manera que el producto se estructure alrededor de un conjunto de sectores que permiten un valor añadido y una comercialización especializada, ceñida en lo posible a las demandas de los mercados emisores tradicionales y aquellos que han dejado de ser emergentes consolidandose en el panorama turístico global. Al hablar de producto, Barceló cargó las tintas en lo urgente que para Menorca es mejorar su oferta.

Una vez finalizada su intervención, la consellera respondió algunas cuestiones planteadas por los asistentes, algunos de los cuales, pese a valorar positivamente la celebración de este tipo de encuentros, coincidieron en que habían sido pocas las novedades ofrecidas por Barceló. "Nos conocemos todos de mucho tiempo", resumía uno de ellos.

Ley 4/2010, ocasión única
Doce millones de euros solicitados, que supondrán inversiones por valor de 16, 5 millones, son para Joana Barceló un primer paso en el camino del retorno a la competitividad del sector turístico menorquí. La consellera insistió en la necesidad de abordar mejoras que permitan ofrecer un producto con valor añadido y subrayó las bondades del nuevo marco normativo para animar a los empresarios a invertir. "No habrá mucho más crecimiento nuevo, el valor que tienen nuestras empresas es muy grande y las inversiones en ellas no se recuperarán en un plazo breve pero sí que resultarán claramente rentables", argumentó Barceló. La responsable del turismo balear centró su recomendación en la mejora de las infraestructuras hoteleras, pero también se refirió a profesionalización de los servicios en todos y cada uno de los sectores. "La competencia será más fácil de ganar si no vamos por libre, sino que incidimos en cada uno de los elementos que permiten tener valor añadido. Estamos ante una gran oportunidad", señaló.