SA GALERA. La nueva escoleta de Ciutadella acogerá alumnos seguramente a finales de este mes - Cris

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Uno de los efectos de la crisis económica es el incremento del número de personas que se quedan en casa por no tener un trabajo al que acudir a diario. Esta circunstancia ha producido un efecto colateral en las escoletas de Menorca, que han visto como en este curso ha disminuido el número de alumnos. El descenso ha sido leve, del dos por ciento en relación al curso anterior según las primeras cifras facilitadas por los centros educativos, y con algunas excepciones. En Es Castell, por ejemplo, su escoleta ha visto como este año tenía que atender a más alumnos que en el pasado curso.

No obstante, en Maó y Ciutadella se ha notado el descenso. En Maó la matriculación ha bajado en 25 alumnos, pasando de 400 alumnos de media en las aulas de las escoletas a 375. El concejal de Educación, Joan Carles Villalonga, confirma que "hay indicios de que parte de este descenso pueda deberse a motivos económicos". Así, si los padres no tienen trabajo y se quedan en casa son ellos mismos los que cuidan de sus hijos, o en una segunda versión, los padres cambian la escoleta por los abuelos.

La escoleta cuesta más de cien euros al mes, y los abuelos acostumbran a salir gratis. Villalonga también explica que este curso han notado que entre los que se inscriben en las escoletas aumenta la presencia de familias nacidas en Menorca, y en cambio disminuye el número de inmigrantes.

En Ciutadella, a pesar de que este curso hay tres alumnos menos que el pasado, se dispone de un aula más, tras la puesta en funcionamiento de la nueva escoleta Sa Galera. Además, en enero se habilitará otra aula más para bebés, y en abril se pondrán en marcha dos aulas más para el programa Alpin, para padres que quieran matricular a sus hijos en una escoleta desde abril hasta agosto.

EDIFICIOS SIN ACABAR
En dos municipios el presente curso ha comenzado con obras en las escoletes. En Es Mercadal esto implica un retraso a la hora de poner en marcha el aula para bebés, que no estará disponible hasta que el nuevo edificio esté listo. En Ferreries, las dependencias de la nueva escoleta -que unificará las dos actuales- no se usarán hasta el próximo curso, a causa de las obras que se realizan en el edificio que acoge esta instalación.