Hoy hace exactamente una semana que el empresario de la construcción Juan Estrada, de 50 años y nacido en Ecuador, denunció que había sido asaltado a punta de pistola en su domicilio en la carretera de Alcalfar. Los asaltantes, un hombre y una mujer, amordazaron al empresario y se apoderaron de 92.000 euros que tenía en su domicilio, según confesó a la Policía Local de Sant Lluís y a la Guardia Civil.
Juan Estrada ha asegurado al "Menorca" que el lunes día 20, dos días antes del robo, tenía previsto abonar al Ayuntamiento de Alaior el canon correspondiente a 2010 de las concesiones de dos balnearios de Son Bou, por un importe de 71.000 euros, quedando pendiente unos 3.000 euros que tenía previsto pagar al inicio de la próxima temporada. Además, el empresario tenía en su domicilio 12.500 euros en concepto de finiquito de los dos empleados de las instalaciones de Son Bou , 6.000 euros para pagar unas facturas de Distribuciones Goñalons y otros 1.200 euros para abonar a Nadal y Martínez.
No obstante, aquel día el empresario no llegó a realizar los pagos, para poder atender unas cuestiones familiares, por lo que aplazó hasta el miércoles la ejecución de sus compromisos.
Estrada recuerda que el miércoles, sobre las 11 horas, estaba sentado junto a la mesa de la cocina, mientras arreglaba los fajos de billetes para efectuar los distintos pagos con sus acreedores. A esta hora oyó unas voces en el exterior de su vivienda, abrió la puerta principal y entró un hombre encapuchado que llevaba un arma, seguido de una mujer también con la cara cubierta, y le dijo "hoy vas a morir".
Estrada sostiene que el encapuchado no se esperaba encontrar una cantidad importante de dinero, puesto que "vi unos ojos de sorpresa, brillantes, cuando miró los fajos de billetes que estaban sobre la mesa". Seguidamente, la mujer que iba provista de guantes ató al empresario en un aparato de musculación que había en la sala de estar. Estrada señala que los asaltantes hablaron en español, aunque no puede precisar su procedencia, "estoy seguro que no tenían acento sudamericano, andaluz o menorquín".
Los asaltantes introdujeron el dinero en el interior de una bolsa que llevaban y, cuando aún permanecían en el interior de la vivienda, sonó el móvil del empresario que estaba sobre la mesa de la cocina. Al cabo de 10 minutos, el hombre y la mujer salieron de la vivienda, momento en que Estrada pudo oír la voz de una tercera persona que se encontraba en el exterior, "era la voz de un hombre que les dijo 'daros prisa' con acento extranjero".
La Guardia Civil sospecha que el empresario simuló el robo
Juan Estrada está molesto por el hecho de que, según asegura, la Guardia Civil sostiene que el empresario simuló el asalto a mano armada y robo de los 92.000 euros. En este sentido, Estrada afirma que puede demostrar la procedencia del dinero como fruto de las recaudaciones de los balnearios que explota durante la temporada turística en Son Bou.
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