LOLA DEL REY IBÁÑEZ. VOCAL DE LA ASOCIACIÓN "ALAIOR BALLA" - Elena

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Autoficha
Me llamo Lola Del Rey Ibáñez y tengo 47 años. Nací en Valencia pero llegué a la Isla hace 21 años. Vivo en Alaior, estoy casada y tengo dos hijos. Trabajo en la Cooperativa San Crispín y soy vocal de la asociación Alaior Balla. De hecho, me encanta bailar y, cuando dispongo de más tiempo, también me gusta salir a caminar y leer.

¿Cuándo y cómo se involucró en la asociación?
Fue en marzo del 2005 cuando un grupo de amigos nos juntábamos para bailar en el Casino de Alaior, concretamente, bailes de salón. Al ver que aquello tenía éxito, pedimos permiso al Ayuntamiento para utilizar el anexo del colegio Doctor Comas como lugar de encuentro. Rápidamente, pasamos de 12 socios a 140.

Con tantos aficionados al baile, necesitarán más espacio, ¿cómo lo hacen para recibir las clases?
Contamos con cuatro parejas de profesores que imparten bachata, chachachá, tango, sevillanas y country. Las diferentes clases son de viernes a domingo, tanto en el colegio como en el instituto Josep Miquel Guàrdia. Los sábados, a partir de las 22.30 horas, aprovechamos para ir a practicar al anexo lo que los profesores nos han enseñado. El country es el único baile que se imparte en el Casino, un baile que está teniendo mucha aceptación porque es para mujeres sin pareja, bien porque no tengan o porque sus maridos no se hayan querido apuntar a bailar.

Precisamente por el problema de espacio, pronto dispondrán de una nave para la asociación, ¿cómo está este tema?
Llegamos a un acuerdo con la Cooperativa San Crispín y nos han alquilado una nave. Los propios socios vamos los sábados por la mañana a acondicionar el espacio, que queremos tener listo para Navidad. Hemos hecho números y el alquiler nos sale por unos 10 euros por pareja al mes, que es la cuota de socio. Estamos muy ilusionados porque ya somos muchas personas y necesitamos un lugar más amplio donde desarrollar nuestras actividades. Solemos organizar una fiesta al mes. Este sábado celebraremos la de Halloween, a la que se puede ir disfrazado.

¿Cree que Alaior cuenta con locales donde poder ir a bailar?
Para la gente de nuestra edad, no. En nuestra asociación hay gente de Es Mercadal y de Maó porque se echa de menos un espacio en el que poder bailar. El anexo del colegio, donde nos reunimos por ahora cada sábado, está abierto para todos los interesados.

¿Qué le aporta a usted el baile?
He pasado de quedarme en el sofá a estar deseando que llegue el fin de semana para arreglarme y salir a bailar. Además, he hecho amistad con muchas personas gracias a la asociación y me gusta mucho juntarme con ellas a compartir un buen rato. Actualmente, estoy aprendiendo tango y sevillanas.