POLÍGONO. Empresarios y políticos coinciden en la necesidad de más suelo industrial en Ciutadella - Archivo

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La alcaldesa de Ciutadella, Pilar Carbonero, asegura que la ampliación del polígono industrial de Ciutadella estaría tan avanzada como la cuarta fase del polígono de Maó si el PP no hubiera modificado el rumbo que en 2003 heredó del anterior gobierno progresista. Carbonero responde así a las críticas que los conservadores han realizado a su gestión en este tema, acusándola de retrasar la ampliación y de no mostrar interés en esta iniciativa.

La alcaldesa explica que en 2003, cuando el PSOE gestionaba el área de Urbanismo en el Ayuntamiento de Ciutadella, se dejó iniciado el proceso de expropiación de los terrenos del sector conocido como B9 para acometer así la ampliación del polígono industrial. Al llegar al poder, el pacto PP-PMQ, decidió cambiar el sistema de desarrollo de la zona, lo que supuso, explica Carbonero, retrasar la creación de suelo industrial. Además, se cambió hasta dos veces de sistema de desarrollo, "con lo que la cosa se enredó aún más", explica la alcaldesa.

Ahora mismo, el equipo de gobierno está trabajando en la elaboración de un pliego de condiciones que permita licitar la redacción del proyecto de urbanización, paso previo para acometer las obras que permitan transformar la zona actual en parcelas industriales. No obstante, Carbonero asegura que el papel del Ayuntamiento será muy diferente ahora del que podría haber jugado si la gestión del PP cuando gobernaba hubiera sido distinta. En este sentido, asegura que "lo más grave de la gestión de los populares fue la permuta del suelo industrial que tenía el Ayuntamiento en la zona de ampliación, llegando a permutar incluso parcelas de las que aún no disponía".

Esta actuación ha propiciado que el Consistorio haya pasado de una posible posición mayoritaria entre los propietarios de los terrenos a disponer tan solo del 15 por ciento del terreno de la ampliación, el que le corresponde por la cesión obligatoria a la Administración del suelo.

Con esta situación "hemos perdido una oportunidad muy importante de influir en los precios del futuro suelo industrial, y nos quedamos así con poco margen para favorecer a los empresarios y su desarrollo. Me preocupa que, aunque mañana mismo desarrolláramos el B9, los resultados no serían los óptimos por culpa de la gestión del PP", defiende Carbonero.