Visita. Antich conoció el estado de las obras de la Ley de Barrios - Javier

TW
0

El presidente del Govern, Francesc Antich, destacó ayer la sensibilidad de los municipios menorquines hacia la rehabilitación de espacios públicos y edificios y aseguró que "en unas islas pequeñas, con territorios frágiles, en vez de generar grandes crecimientos hemos decidido mejorar y adecentar lo ya construido, esa es nuestra apuesta".

Antich realizó estas manifestaciones momentos antes de iniciar su visita a las obras de mejora del centro histórico de Maó, que se realizan en las plazas Espanya y del Príncep, y que fue el proyecto que obtuvo la más alta valoración de los que optaron a la financiación del Govern a través de la Ley de Barrios.

La remodelación costará 1.100.000 euros y la aportación de la Conselleria balear de Obras Públicas y Vivienda alcanza el 90 por ciento de dicho presupuesto. El titular del área, el conseller Jaume Carbonero, señaló que las ayudas de la Conselleria para rehabilitación suman en Menorca 122 euros por habitante, frente a los 57 de Mallorca y los 38 de las Pitiusas.

"Eso quiere decir que Menorca es un referente en materia de rehabilitación", aseguró, "una cultura que está perfectamente instalada en los municipios y las familias". No obstante, Carbonero añadió que el desarrollo de la ley y las obras de mejora y rehabilitación no serían posibles sin la complicidad de los ayuntamientos "pero no sólo los municipios con necesidades, sino aquellos que tienen proyectos, por eso aquí está funcionando bien".

En este sentido, el presidente del Consell, Marc Pons, manifestó que Maó "ha sabido jugar bien sus cartas, definiendo proyectos" como el del arreglo del centro histórico que, según explicó el alcalde, Vicenç Tur, unificará la estética del casco comercial desde la calle Ses Moreres hasta el Camí des Castell.