La Consellera balear de Turismo y Trabajo, Joana Barceló, anunció ayer en Menorca que el Govern estudia personarse como acusación particular contra los controladores aéreos que abandonaron sus puestos de trabajo este puente por el daño causado a la economía y la ciudadanía de las Islas.
El Ejecutivo autonómico terminará de definir la fórmula jurídica elegida a lo largo de esta misma semana. Barceló, que calificó la huelga encubierta de los operadores aéreos de "salvaje y despropósito brutal", indicó que el Govern está a la espera de conocer la respuesta "contundente" del Gobierno para garantizar a los mercados emisores que estos hechos no volverán a producirse. Dicha respuesta será inmediatamente comunicada a las oficinas europeas de Tourespaña, con el fin de transmitir un mensaje de confianza en relación al funcionamiento del transporte aéreo en las Islas.
La consellera también defendió mano dura contra los incumplimientos laborales de los controladores aéreos y calificó su comportamiento de "antidemocrático". Recordó, al respecto, que como cualquier trabajador, tienen a su alcance las herramientas jurídicas y legales para declararse en huelga con la obligatoriedad de adoptar servicios mínimos en las Islas, unas herramientas que en este caso, subrayó, "se han saltado a todos los niveles".
Barceló hizo estas declaraciones tras el acto de conmemoración del trigésimo segundo aniversario de la Constitución celebrado ayer en Menorca, donde el director insular de la Administración del Estado en Menorca, Javier Tejero, también arremetió contra los controladores y los "intereses espurios" que defienden de forma "injusta y antidemocrática" en contra de la libertad de la mayoría de los ciudadanos, a la vez que defendió el valor de la Constitución como garante de los derechos civiles.
Tanto Tejero como Barceló defendieron en este sentido el uso por parte del Gobierno de la facultad que le otorga artículo 116,2 de la Carta Magna para declarar el estado de alarma en una situación manifiesta de pérdida de libertad como fue el cierre del espacio aéreo nacional. "El problema es que se haya de llegar a este nivel de intervención", apostilló Barceló.
ASHOME: "Podrían existir entre 800 y 1.000 afectados"
El presidente de la patronal hotelera ASHOME, Joan Melis, afirmó ayer que el caos aeroportuario del pasado fin de semana ha generado una gran incertidumbre entre los mercados emisores.
De hecho, aseguró que algunos operadores turísticos ya se han interesado en saber si esta situación podría repetirse durante las fiestas de Navidad o incluso la próxima temporada estival.
La afectación económica en el sector turístico isleño será cuantificada en los próximos días, aunque según Melis se calcula que "podría haber entre 800 y 1.000 personas afectadas".
Marc Pons reclama reformas para evitar situaciones similares
El presidente del Consell, Marc Pons, señaló que el Ejecutivo Insular está del lado de los cientos de ciudadanos damnificados por el cierre del espacio aéreo y se mostró a favor de reformar el sector de los controladores aéreos para evitar en un futuro hechos similares.
Pons informó igualmente que el gobierno insular evalúa en la actualidad la repercusión económica de todo lo sucedido y su afectación a la imagen de Menorca como destino vacacional.
"Detrás hay fuerzas oscuras que acaban teniendo incidencia real en la calidad de vida de los ciudadanos", aseveró.
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