la solana. La casa de los populares cantantes se encuentra en el puerto de Maó - Archivo

TW
0

Víctor Manuel y Ana Belén no eran propietarios de su casa de veraneo Los Pinos, en La Solana, cuando pidieron permiso al Ayuntamiento de Maó, en 2003, para construir una piscina en una porción de terreno anexa a su actual vivienda.

Según consta en una certificación emitida el pasado 22 de noviembre por el Registro de la Propiedad de Maó, el chalé no se inscribió a nombre de los cantantes hasta el 21 de marzo de 2006. La casa de recreo, edificada en una parcela de 307 metros cuadrados en la zona de S'Altra Banda, consta inscrita a favor de los artistas "por mitades indivisas".

De acuerdo con este documento, al que ha tenido acceso "Es Diari", la casa está afecta a la licencia otorgada el 13 de abril de este año por la Junta de Gobierno de Maó para construir la piscina.Immobles Quintana SA, propietaria del solar vecino al chalé, ha denunciado que la licencia concedida en su día por el Consistorio está "caducada" y "viciada", dado que cuando se solicitó, el terreno, "además de ni tan siquiera existir, naturalmente no era propiedad de los solicitantes".

Efectivamente, Víctor Manuel y Ana Belén comprarían el terreno a la sociedad Promocions Urbanístiques Municipals (PUM) el 24 de agosto de 2009, es decir, mucho tiempo después de solicitar el permiso por primera vez.

La escritura de propiedad del inmueble es la parte del león de una polémica que desde los años ochenta no ha dejado de dar noticias. Los hechos se remontan a 1986, cuando los hermanos Mateo e Ignacio Pasarius Fontiroig vendieron la finca a Víctor Manuel y Ana Belén antes de que se hubiera distribuido la herencia de su padre con su otra hermana, María Rosa Pasarius, quien no tardaría en reclamar notarialmente su condición de cotitular de la parcela, iniciando una larga batalla en los Juzgados con el propósito de recuperar su propiedad.

En 1994, el Tribunal Supremo anuló la venta de la finca y ordenó su restitución a todos los herederos, lo que devolvía oficialmente a Rosa Pasarius un tercio del inmueble. Sin embargo, los cantantes pudieron seguir alojándose en La Solana, al ser nombrados administradores de la casa por los otros herederos de la familia Pasarius.


Lea el artículo completo en la edición impresa del "Menorca" o puede descargarse el pdf a través de nuestro servicio de venta on-line ( pulse aquí )