El Hospital Mateu Orfila sigue sin cubrir las dos plazas de cardiología que tiene convocadas desde hace cuatro años. El único cardiólogo en plantilla, el doctor Carlos Sánchez Lafraya, está de baja por enfermedad desde el mes de octubre y además se jubilará en febrero. Este hecho ha provocado la movilización de la sociedad civil menorquina frente al IB-Salut de la mano de la Asociación de Consumidores y Amas de Casa que acumula más de medio millar de firmas en su campaña en demanda de cardiólogos para la Isla "¡Ya en 2011!", iniciada hace apenas una semana.
Desde el área de Salut de Menorca se insiste, no obstante, en que la asistencia en esta especialidad está garantizada. Las consultas ordinarias están siendo cubiertas por el servicio de Medicina Interna y las urgentes o preferentes a través de Cuidados intensivos, donde también se realizan pruebas complementarias. Además, el servicio es reforzado una vez a la semana con un cardiólogo que se desplaza desde Palma. Sin embargo, la ampliación de esta cobertura médica con un incremento de días y de estancias en Menorca del especialista anunciada el pasado mes de noviembre por el propio IB-Salut, aún no se ha cumplido a pesar que se habló entonces de que sería una realidad "en breve". El director asistencia del servicio de salud de Balears, Joan Pou, justifica este retraso en la complejidad que ha supuesto para el personal médico palmesano el reciente traslado al nuevo hospital de Son Espases. Aun así, asegura que en el mes de febrero se incrementarán los cardiólogos y las estancias de los mismos en Menorca para poder dar fluidez a las listas de espera de esta especialidad.
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El Área de Salut de Menorca remarca igualmente que "desde hace tiempo" la dirección del hospital busca cubrir la plaza de cardiólogo al margen de las oposiciones (oferta pública de empleo), ya que de momento no hay ninguna convocada por el Govern para Menorca en esta especialidad. De hecho se asegura que "se están valorando currículums". Claudio Triay, delegado en Menorca del Sindicato Médico de Balears (SIMEBAL) reconoce esta dificultad y se muestra pesimista en cuanto a una pronta solución e incluso augura dificultades a medio plazo en otras especialidades a medida que los facultativos del Hospital vayan jubilándose. "Los cardiólogos son escasos y prefieren grandes hospitales donde se hacen grandes técnicas, Menorca tiene para ellos poco atractivo profesional", señala. A este handicap se suma en su opinión la insularidad y el recorte en los sueldos sufridos por los profesionales sanitarios españoles. "Para muchos jóvenes es más atractivo irse al extranjero, donde están mejor considerados. Ahora Inglaterra es un polo de atracción para muchas familias", añadió.
Un 20 por ciento de pérdida
Triay afirma que en Menorca el personal facultativo ha perdido un 20 por ciento de poder adquisitivo entre los recortes laborales aprobados por el Gobierno Zapatero, la subida del IPC (Índice de Precios al Consumo) y el incumplimiento de parte de los acuerdos alcanzados con el IB-Salut tras la huelga de médicos de 2008. En cuanto a la solución que el IB-Salut está dando a la falta de cardiólogos en la Isla, el delegado del SIMEBAL reconoce que no se puede hacer mucho más. "Es una situación precaria y no es la ideal porque sería bueno que el paciente tuviera al mismo cardiólogo, pero ya es algo que se desplace un cardiólogo a la Isla", concluyó Claudio Triay.
1 comentario
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i dale , siempre dependiendo de palma, a ponerse las pilas porque ahi se lo quedan todo .prest no pudrem ni pusarmos malals ,no se cubrexen ni metges de cabecera i si no tenim especialista(en faltan bastans) que am de fer? pues si no venen ells almens derivin pacients a palma i no mus tenguin enredadas