MUELLE COMERCIAL. Los pantalanes ocuparán el espacio en el que ahora amarran los grandes buques - Archivo

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Una vez conocido el proyecto para la reordenación del puerto interior de Ciutadella, cuyo principal punto pasa por la creación de 106 amarres en el actual muelle comercial, el GOB alerta de que la propuesta del Govern balear puede resultar insegura, e incluso peligrosa. Los ecologistas afirman que "precisamente esta zona que ahora se quiere llenar de barcas se consideró un espacio peligroso debido al efecto que las grandes rissagues provocan en la parte más interior del puerto, donde el agua se puede retirar del todo y volver con violencia. Éste, al menos, fue el principal argumento que se utilizó para justificar la necesidad del puerto exterior que se ha construido en Son Blanc. Si la zona era peligrosa para grandes buques, más lo debe ser aún para pequeñas embarcaciones".

En este sentido, desde el GOB concluyen que "se olvidan ahora las consideraciones utilizadas para justificar el dique exterior". Por eso, los ecologistas se interesarán por conocer los informes de seguridad que acompañen a la reordenación anunciada la pasada semana en Ciutadella por el conseller de Obras Públicas, Jaume Carbonero, el presidente del Consell Marc Pons y la alcaldesa de Ciutadella Pilar Carbonero.

Tras conocer por prensa el proyecto de reordenación, desde el GOB se considera que hay una segunda asignatura pendiente en esta iniciativa, la evaluación ambiental del mismo. Así, los ecologistas recuerdan que "los nuevos usos del puerto deben pasar previamente por el trámite ambiental correspondiente, ya que tanto el incremento de amarres como la construcción de nuevos pantalanes deben ser evaluados, según dice la legislación vigente de ámbito estatal y europeo". Los ecologistas alertan que, hasta ahora, el Govern balear no ha especificado cómo se afrontarán en las nuevas instalaciones actividades como el vaciado del agua sucia de las embarcaciones o el mantenimiento de buques, donde se usan pinturas, disolventes, aceites y otros elementos contaminantes. El GOB teme que estas actividades queden sin control.

Según los ecologistas, el Ejecutivo autonómico ha actuado con celeridad empujado por la proximidad de las elecciones. En este sentido, el GOB afirma que "la proximidad de los comicios motiva que se hagan anuncios de intervención inmediata, pero la ley es igual para todo el mundo, y las administraciones públicas deben dar ejemplo de coherencia, transparencia y de planificación lógica". En este sentido, cabe recordar que el proyecto de puerto exterior de Ciutadella ya se saltó un trámite ambiental, después que la Comisión Balear de Medio Ambiente, con el voto en contra de su presidente, decidiera que no era necesario realizar una evaluación de impacto ambiental para la prolongación del dique exterior con dos cajones y una longitud de 80 metros más.