INSTALACIÓN. Las pescaderas confían en que pueda aguantar las inclemencias del viento y la lluvia - Gemma Andreu

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Las pescaderías de Ciutadella se han trasladado a la carpa provisional instalada en la vecina Plaça Francesc Netto hasta que terminen las obras de reforma del edificio del Mercat des Peix. Las paradas atienden al público desde el martes en el recinto provisional instalado por el Ayuntamiento.

El plazo de ejecución de las obras de reforma se estima en unos 3 meses, aunque las pescaderas se temen que no podrán inaugurar las remozadas dependencias hasta Sant Joan.

Los representantes de las 6 paradas de venta de pescado existentes en Ciutadella comentan que el traslado conlleva una serie de inconvenientes que asumen con paciencia con el deseo de estrenar unas instalaciones definitivas en condiciones. "El mercado tenía tres inconvenientes que obligaban a una actuación de urgencia", señalan y citan los problemas en la instalación eléctrica, las baldosas que eran resbaladizas y la aparición de goteras.

Con el traslado, las pescaderas deben ingeniárselas para transportar a diario el material que utilizan para la venta, que por la noche queda depositado en un edificio vecino cerrado. También apuntan que la existencia de un entarimado provisional dificulta la limpieza del pavimento bajo la carpa al final de la jornada. A la vez, les preocupa la incidencia del mal tiempo. La instalación de la carpa ha afectado al perímetro de la tienda de alimentación y al bar-cafetería vecinos.