Sa Nostra. La entidad tampoco tiene previsto eliminar, a priori, ningún cajero automático - Archivo

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Sa Nostra mantendrá las 17 oficinas que la entidad tiene en Menorca y garantiza la continuidad de sus 76 trabajadores, si bien agilizará prejubilaciones o traslados voluntarios, según confirmaron ayer fuentes de la caja. La remodelación que lleva a cabo Sa Nostra tras su integración en el Banco Mare Nostrum (BMN) fruto de su fusión con Cajamurcia, Caixa Penedès y Caja Granada, también afectará al organigrama de cargos en la Isla, "por política comercial y de negocio". Así el delegado de zona en Menorca Germán Sintes, ocupará un nuevo destino y, aunque continuará como apoderado de la entidad en la Isla, será sustituido próximamente por Manuel Lozano, que ha ocupado puestos similares en Madrid, Canarias y Balears. Las rotaciones de directivos afectan a todas las islas.

Cuatro millones de clientes
BMN es el grupo financiero líder en el arco Mediterráneo y uno de los más solventes del sistema financiero español por fondos propios, con más de 3.300 millones de euros, casi cuatro millones de clientes, y un volumen de negocio de más de 103.402 millones de euros. Actualmente, cuenta con 8.800 empleados y unas 1.700 oficinas en el ámbito nacional, si bien la reciente fusión obligará al cierre de aproximadamente el 10 por ciento de las sedes. Ninguna de ellas en Menorca y tampoco, a priori, se cerrarán cajeros automáticos de Sa Nostra en la Isla.

Fuentes de la entidad explican que las dos oficinas de Sa Nostra en Barcelona serán gestionadas a partir de ahora por Caixa Penedès, mientras que la decena de sucursales existentes en Madrid pasan a denominarse BMN (en total el grupo contará en la capital con 60 oficinas). Las sedes del grupo en la Comunidad Valenciana y Albacete dependerán de Cajamurcia y las existentes en Andalucía, Ceuta y Melilla, de Caja Granada. Por su parte, la caja balear gestionará directamente 238 oficinas en Balears y Canarias bajo la marca Sa Nostra.

Continuidad de la marca

Banco Mare Nostrum se apoya sobre un modelo de franquicias regionales y pretende preservar la identidad de cada una de las entidades fundadoras. Este modelo se utiliza ya en países como Francia, Alemania, Austria o Suiza. Permite mantener la personalidad jurídica, la marca, la lealtad territorial, así como sus propios órganos de gobierno y su Obra Social independiente. BCN quiere ser además en Balears una entidad líder en el trato al cliente "fuerte y solvente", "un banco para los mercados y una caja para las personas", remarcaron las mismas fuentes parafraseando unas declaraciones realizadas recientemente por su presidente, Carlos Egea, durante la primera reunión de los principales directivos de la entidad celebrada en Palma. El cliente será la prioridad y a la vez el elemento diferenciador. Es la filosofía que siempre ha movido a las cajas y que seguiremos manteniendo", indicaron.