Subir una foto de las vacaciones a una red social, consultar el correo electrónico, buscar información en la red o recibirla; será posible todo esto realizarlo desde un ordenador portátil, un iPhone o un iPad, sentado en un banco de la plaza Esplanada de Maó a partir de este mismo verano.
El centro histórico y comercial de la ciudad dispondrá de conexión inalámbrica a internet, gratuita durante los primeros treinta minutos, gracias a la iniciativa del Consell, el Ayuntamiento y la asociación de empresas de servicios en línea e informática ACCESO para desplegar la red wifi, dentro del proyecto Menorca Accesible de la Conselleria de Cooperación Local e Innovación, que dirige Susana Gomila.
El Consell instalará 18 nodos en distintas ubicaciones del centro urbano, diez de titularidad pública y ocho privadas, con el objetivo de dar cobertura de internet desde la plaza Esplanada hasta la Miranda, incluyendo las calles comerciales de Ses Moreres, Costa Hannover, S'Arravaleta, Bastió, plazas de la Constitució y de la Conquesta. En la Estación de Autobuses y en el Claustre del Carme se colocarán los puntos de partida que recibirán la señal de la red de tecnología Wimax, la misma que utiliza el Consell para dar cobertura de internet a las viviendas y empresas situadas en suelo rústico o zonas turísticas que actualmente no pueden conectarse. El coste inicial de la red es de 15.000 euros, asumidos por el Consell y destinados a la adquisición de los equipos, aunque la consellera Susana Gomila señaló que el retorno de dicha inversión será del 90 por ciento en un plazo de siete años. Según la normativa de telecomunicaciones, un 10 por ciento del caudal de la nueva red wifi se tiene que dedicar a servicios de autoprestación de la Administración que la promueve, en este caso el Consell. El 90 por ciento restante se dedica al acceso de los ciudadanos a la red y a la promoción del comercio local. Según explicó la consellera, la publicidad será estática, en la página web, y dinámica, con mensajes que entrarán en los móviles al entrar en los enclaves wifi. Por su parte, el Ayuntamiento cederá los espacios públicos y negociará con los particulares, para que ACCESO pueda instalar los equipos. La asociación también diseña la plataforma y asume la explotación y mantenimiento de la red.
Una prueba piloto que, si funciona, se extenderá a todos los municipios
Son muchas las ciudades españolas que han optado por facilitar el acceso a internet en sus cascos históricos para, más tarde, extenderlos a los barrios. La red sale a la calle y el sistema wifi permite chatear, enviar un mail o 'googlear' en una terraza o mientras se descansa en un parque. La conexión es sencilla. El usuario situado en el punto de cobertura buscará la señal inalámbrica y se registrará en la página; instantes después recibirá un mensaje de móvil con la clave para comenzar a navegar gratis durante treinta minutos. La velocidad, de 256 kb, será más baja para "no hacer competencia" a los operadores "pero suficiente para cargar una foto o consultar el correo", explicó ayer Santiago Barro, presidente de la asociación ACCESO, que en estos momentos está diseñando la página web. Tampoco se ha fijado aún el precio para una navegación avanzada, con más velocidad, para aquellos ciudadanos que quieran contratarla.
El wifi se implanta en Maó como una experiencia piloto que se quiere extender al centro de cada uno de los pueblos de Menorca, tal y como manifestó ayer el presidente del Consell, Marc Pons, quien destacó que dicha conexión hace que la Isla sea más competitiva como destino turístico.
"Internet no es ya una opción, es una necesidad, con las redes sociales la gente quiere compartir todo al momento", aseguró por su parte el presidente de ACCESO.
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