El equipo de gobierno del Ayuntamiento de Ciutadella iniciará tras la próxima sesión plenaria los trámites para modificar el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) con la finalidad de catalogar como equipamiento público la zona de Cala Blanca en la que se ubican sus cuevas subterráneas. Tal como ha ido informando este periódico, la modificación del PGOU es un paso imprescindible si el Consistorio quiere abrir al público las grutas subterráneas.
La nueva catalogación de la zona permitirá compatibilizar los usos actuales del suelo con la catalogación como espacio público del subsuelo. Así lo explica la alcaldesa Pilar Carbonero, quien entiende que este paso, además de ser un avance necesario en el camino para explotar las cuevas, "aporta mayor seguridad a la hora de preservar estos espacios". De esta manera, Carbonero entiende que la modificación del PGOU deberá ir acompañada de un informe exhaustivo de cada una de las zonas, que permita determinar a qué profundidad se encuentran las cuevas, con la intención de delimitar las actuaciones que se podrán llevar a cabo en la superficie sin riesgo de perjudicar las grutas.
Recientemente el equipo de gobierno ha finalizado las entrevistas con cada uno de los propietarios de las cuevas, encuentros en los que se ha solicitado la cesión gratuita del uso de las cuevas hasta que el Consistorio pueda fijar un precio del metro cuadrado y adquiera el espacio. En la propuesta que elevará al próximo pleno, la alcaldesa y concejal de Urbanismo destaca el importante atractivo turístico que concentran las cuevas de Cala Blanca, más aún, asegura, "en un destino turístico maduro con necesidad de ofertas diferenciadas y basadas en la revalorización de nuestro patrimonio".
Actualmente, el equipo de gobierno está a la espera de los resultados del estudio de viabilidad que realiza Vértice Cultural sobre las cuevas.
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