PRESENTACIÓN. Tuvo lugar ayer en la sala de plenos de Es Mercadal - P.AM

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Los caballos de raza menorquina dejarán paso este fin de semana a los equinos españoles, que se darán a conocer en el Recinto Ferial de Es Mercadal en la que será la primera edición de la feria de caballos de raza española.

Esta convocatoria reunirá a 44 ejemplares, aunque tan sólo 37 participarán en el concurso morfológico, tal y como explicó ayer el presidente de la Asociación de Caballos de Raza Española de Menorca, Sebastià Cervera, quien recalcó que, a pesar de que la feria contará con la participación de un juez de la Península, el certamen no es de carácter oficial ya que para ello debería contar como mínimo con la participación de 75 caballos y, al menos esta primera edición, no cuenta con la infraestructura necesaria para acoger a tantos equinos.

La feria abrirá sus puertas mañana a las 9.30 horas con el concurso morfológico de potros y caballos, mientras que el de potras tendrá lugar por la tarde. La jornada finalizará con una actuación a cargo de los cuadros de baile de la Casa de Andalucía de Menorca.

El domingo se celebrará el concurso morfológico de yeguas mayores de cuatro años y la entrega de trofeos a los caballos ganadores, tras el cual tendrá lugar un espectáculo ecuestre que constará de seis números entre los que destacarán un carrusel de doma clásica, un volteo, un pase a dos y un pase de ocho carruajes antiguos, según destacó Cervera.

El caballo de raza española no presenta diferencias morfológicas sustanciales en relación a los equinos menorquines aunque, tal y como subrayó el vicepresidente de la asociación, Xiscu Triay, los animales españoles son algo más gruesos y tienen un movimiento de patas delanteras más elevado.

El Recinto Ferial acogió el pasado fin de semana la XV Fira del Cavall por lo que la Asociación de Caballos de Raza Española ha podido aprovechar parte de la infraestructura instalada. No obstante, los organizadores reconocen que no esperan una afluencia de visitantes tan elevada como la de convocatoria del caballo menorquín, que fue visitada por alrededor de 15.000 personas.