Increpados. La concentración frente a la carpa se desarrolló sin incidentes, ante la presencia de guardias civiles y agentes de policía - Gemma Andreu

TW
0

Alrededor de cincuenta defensores de los derechos de los animales se concentraron ayer tarde frente a la carpa del circo Roma Dola, instalado en la entrada de Es Castell, para protestar por el espectáculo al incluir éste números con un hipopótamo, camellos, un oso y ejemplares de otras especies.

Una portavoz de la asociación Protectora d'Animals de Maó declaró ayer que la protesta fue un éxito y que se lograron recoger unas 150 firmas en contra de este tipo de negocios, con el fin de que los ayuntamientos redacten una ordenanza que impida la entrada de circos con animales en sus respectivos municipios y que la Isla, en honor a su condición de Reserva de la Biosfera, quede libre de estos espectáculos.

Salvo un momento de tensión, en el que los responsables del circo se quejaron a los agentes de la Guardia Civil y la Policía Nacional que vigilaban a los activistas de la Protectora, la manifestación transcurrió sin incidentes. No obstante, miembros de la Protectora aseguraron que desde el circo se les increpó diciendo que los caballos de las fiestas "sí son maltratados" sin que nadie proteste.

Los concentrados exhibieron pancartas con frases como "El sufrimiento animal no es educación para los niños" y "Dile a tus hijos que los animales no son payasos". El objetivo de la Protectora es "que los padres enseñen a sus hijos el sufrimiento que hay detrás de este espectáculo". Una de las manifestantes llamó la atención por tener el cuerpo pintado como si fuera un tigre y protestar encerrada en una jaula.