TW
0

Las entidades que integran el Tercer Sector Social Illes Balears celebran hoy en Palma una reunión interna para analizar y cuantificar la deuda que mantiene el Govern con esta plataforma, constituida en 2010 para aglutinar a las organizaciones que trabajan por el bienestar de personas con necesidades sociales especiales o no cubiertas. Entre estas entidades se encuentra Caritas Diocesana de Menorca, que está a la espera de cobrar 29.056 euros de ayudas aprobadas en 2010 por la Conselleria de Asuntos Sociales, Promoción e Inmigración, así como por la Conselleria de Trabajo y Turismo, y de otros 45.700 euros correspondientes a 2011.

Además, según informó ayer Antònia Florit, secretaria general de Caritas, el Govern tiene comprometidos con la entidad, para el presente ejercicio, otros 212.000 euros de ayudas correspondientes a dos programas -uno de inclusión social e inmigración y un segundo de itinerarios laborales para personas que perciben la Renta Mínima de Inserción-, y que están pendientes de la firma de los convenios de colaboración con el Consell de Menorca, institución esta última encargada de transferir los fondos a la organización.

Mientras el dinero del Govern no llega, Florit reconoció que Caritas debe afrontar los pagos y adelantar la financiación de programas, algunos de ellos de formación e integración laboral, pero otros, los correspondientes a 2010, destinados a la atención primaria, desde el apoyo a personas dependientes a la cobertura de situaciones de emergencia social, como la entrega de alimentos, la higiene, el pago de transporte o de meses de alquiler de viviendas de aquellos ciudadanos que se han visto en dificultades por la crisis económica.

En total la deuda del Ejecutivo balear con Caritas de Menorca -bien de programas ya ejecutados o aquellos comprometidos que aguardan la firma del convenio-, asciende a 286.756 euros, cifra similar a la que presenta la organización en las otras islas, señaló Florit. En concreto, las subvenciones pendientes de la Conselleria de Asuntos Sociales son las de atención a la dependencia, las ayudas de emergencia social, y los programas de infancia y juventud y de inclusión social (160.856 euros). En cuanto a la subvención global pendiente de la Conselleria de Trabajo corresponde al programa formativo en gestión de residuos y al de itinerarios de inserción laboral (125.900 euros).