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Las negociaciones mantenidas en las últimas semanas entre el PP de Es Castell y Unió Menorquina (UMe) finalizaron ayer al mediodía con la firma del esperado pacto de gobierno para los próximos cuatro años.

Las bases del acuerdo ponen especial acento en la austeridad y el control del gasto, lo que se ha traducido en un primer momento en la inexistencia de dedicaciones exclusivas por parte de los concejales y en la reducción de dos a un cargo de confianza, tal y como explicó ayer el futuro alcalde, Lluís Camps. "Los tiempos de crisis que vivimos exigen que los gobernantes nos apretemos también el cinturón", aseveró.

Camps ocupará la alcaldía durante los próximos cuatro años, mientras que la líder de UMe, Irene Coll, gestionará la cartera de Hacienda, y Florencio Conde, número 2 de la candidatura de la formación menorquinista, será el segundo teniente de alcalde de Urbanismo. En este sentido, el popular destacó que durante las conversaciones con UMe no se planteado en ningún momento la posibilidad de que Coll asumiera el cargo de alcaldesa durante un periodo determinado. A este respecto, la dirigente de la formación fue muy clara: " Discutir por un año o por dos de alcaldía no me parecía apropiado ni correcto, lo importante es remar juntos para sacar adelante Es Castell".

En relación al reparto de las áreas de gobierno, el futuro primer edil avanzó que Matilde Mamajón gestionará la cartera de Servicios Generales; Jaime Fedelich estará al frente del área de Personal, Brigada Municipal, Entorno Ciudadano y Vías Públicas; Dionisio Marí se hará cargo de la Concejalía de Deportes, y Maria Coll será concejal de Educación, Cultura y, probablemente también, del área de Juventud.

NEGOCIACIÓN
La problemática del agua, el futuro de los cuarteles de la Explanada y la educación han sido los puntos claves de la negociación, que se ha caracterizado por el entendimiento entre ambas formaciones. "No ha habido temas conflictivos sino que nos hemos limitado a pulir algunos matices", reconoció la líder de UMe, quien calificó el acuerdo de "pacto de estabilidad". Camps corroboró las palabras de Coll haciendo hincapié en los puntos en común existentes entre los dos partidos y en los gobiernos conjuntos que han compartido. No obstante, señaló que el pacto "ha sido muy meditado", lo que garantizará seguridad y permitirá ofrecer soluciones efectivas a los problemas del municipio a corto o medio plazo.

Potabilizadora
Una de las primeras cuestiones a las que se enfrentará Camps será la de decidir el sistema adecuado para garantizar la potabilidad del agua en el municipio. "Nuestra voluntad es buscar una solución efectiva y lo más rápida posible", indicó el futuro alcalde. Sin embargo, admitió que la intención de los populares es crear un consorcio insular de aguas con la finalidad de abordar de forma conjunta el problema originado por la presencia de nitratos en el agua para el consumo humano. "Es de sentido común unir esfuerzos para subsanar este defecto en diferentes municipios de la zona de Llevant", indicó Camps.