Fábrica. El visto bueno del juzgado a la operación dará confianza a los clientes de la factoría - Archivo

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El Juzgado de lo Mercantil número 1 de Badajoz ha validado el acuerdo de compraventa de Quesería Menorquina alcanzado el pasado mes de mayo entre los trabajadores de la fábrica mahonesa y los administradores concursales de Carcesa. El contrato incluyó una cláusula suspensiva, según la cual la operación podría echarse atrás en caso de no obtener la aprobación de este juzgado. Sin embargo, una vez transcurrido el período legal de alegaciones al acuerdo, la juez de lo mercantil de Badajoz que gestiona el concurso de acreedores de Carcesa, -propietaria hasta ahora de Quesería Menorquina- ha dado el visto bueno a la operación.

Firma en Maó
La rúbrica definitiva de la compraventa se llevará a cabo previsiblemente el próximo lunes en una notaría de Maó. En este acto estarán presentes una apoderado de los trabajadores y los administradores concursales de Carcesa y de Quesería Menorquina, que comparten uno de sus integrantes, el economista Bautista Martín Molina, coordinador de los respectivos procesos concursales.

El acuerdo de compraventa de Quesería a los directivos y trabajadores de la planta mahonesa se ha cerrado finalmente por 346 euros. Junto al activo de la sociedad, los operarios también asumen la deuda de la factoría, que en 2009 debía 33 millones de euros, de los que la mayoría, 27,35 correspondían a proveedores y a acreedores varios. A ello se suma que Nueva Rumasa hipotecó a favor del Santander la fábrica de Quesería por 15 millones de euros meses después de adquirir la fábrica a la multinacional Kraft por 1,7 millones de euros, y a la que aún adeuda 1,4 millones. Esta deuda es uno de los motivos de que el precio de la transacción haya sido simbólico, ya que el valor de la compañía es negativo en la actual situación.

Tiempo récord
La firma de este acuerdo en tiempo récord se ha logrado en gran medida gracias a la actuación conjunta de las dos administraciones concursales. Y sobre todo, gracias a la ambiciosa iniciativa de los trabajadores y directivos de Quesería Menorquina de constituirse en sociedad laboral, cuyo capital social asciende a 1,7 millones de euros. Tres directivos son los propietarios del 51 por ciento de las participaciones de la fábrica y el resto pertenece a los trabajadores.