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Ser polea trasmisora no siempre resulta fácil sobre todo cuando el "mensaje" lleva consigo una importante carga personal e intelectual, que cabalga entre el "enamoramiento" y la profesión. Margarita Orfila Pons, catedrática de Arqueología de la Universidad de Granada se confiesa una privilegiada por trabajar en algo tan apasionante como es la arqueología y poder "visionar" en presente los descubrimientos que realiza de un mundo que fue y que hoy sigue ahí como testigo fiel de un pasado irrepetible.

¿Tiene algo que ver Calascoves en tu elección por la arqueología?
Muchísimo. Cuando yo tenía 6 o 7 años de edad el profesor Cristóbal Veny empezó sus excavaciones en Calascoves, y yo andaba todo el día metida en aquel berenjenal. Te hablo de cuando el camino a dicha cala era intransitable, con 11 barreras que había que abrir y cerrar. Recuerdo que mi padre, una vez a la semana, trasladaba a uno de ellos a Maó para comprar las cosas que necesitaban … fue, involuntariamente, mi bautismo de fuego. Luego, fui creciendo y quise estudiar Medicina, pero una vez superado el COU e intentar el ingreso a la Universidad para dedicarme a ello, nos presentamos 20.000 aspirantes para 4.000 plazas y desistí.

Intuyo que la profesión de tu padre te atraía, ¿cierto?
Es verdad y por diversos motivos, entre ellos el poder disponer de tiempo libre para dedicarlo a mis cosas, como complemento al horario laboral y ya ves, ahora trabajo en algo que me gusta, me apasiona, y mi horario de "faena" ha llegado a ser de 24 horas pero, disfruto con ello y además me considero una privilegiada.

Te imagino yendo al Colegio de San José, a "ca ses Monges des Cós".
Pero fui poco tiempo, solo hasta los 8 años. Las monjas no me gustaban, tenía que hacer costura y cosas así hasta que logré, de una forma poco ortodoxa, que me trasladaran al colegio de la calle de San José, frente a mi casa y de allí a la Preparatoria, con Margarita Socías de profesora.

¿Cuántos años estuviste en la Preparatoria?
En principio debían de ser tres pero me salté uno y con apenas 10 años, empecé el Bachillerato. Mis padres no se lo creían pero fue así. Socorro Pastor venía a examinarnos y nos iba haciendo una serie de preguntas y a medida que las contestabas correctamente, íbamos avanzando en los pupitres y yo llegué a la primera fila y, tras el examen de ingreso, a Primero.

¿Recuerdas a algún profesor de tu etapa en el Instituto?
Tuve a todos los "históricos", a Pons Monjo, a Terrés, a Barrachina, a Socorro Pastor, a Paz Sirerol, a Hernández Mora, a Bartolomé Orfila a … ten en cuenta que allí cursé los 6 años del Bachillerato y el COU, lo que representa un largo "peregrinaje".

¿Cuál fue la Universidad para dar el "salto"?
La de Palma, donde estuve tres años. El primero fue fatal, no era lo que se dice una buena estudiante, más bien … porque era un "borinot". En la etapa del Instituto, Hernández Mora siempre me suspendía e incluso me tenía medio apartada, hasta que se enteró que era nieta de Rafael, uno de sus mejores amigos, luego la cosa cambió. Incluso, con posterioridad, establecimos una excelente y fructífera relación de amistad.

Es lógico pensar, viendo tu currículum, que tu rendimiento mejoró. ¿Cambio radical?
Digamos que sí, mis notas mejoraron y fui avanzando. En realidad el año que adelanté en el inicio del bachillerato me permitió "recuperar" el tiempo y ponerme al día con relación a la edad. Hice, ya en Barcelona, dos años de Historia General y además pude programar mi carrera "a la carta", convirtiéndome en una buena estudiante.

¿Por qué razón la arqueología apasiona tanto a cuantos os dedicáis a ella?
Por varias razones pero la más importante es porque te permite interpretar el pasado y hacerlo con los materiales originales. Yo, como cualquier otro arqueólogo, puedo interpretar las acciones que el hombre ha ido realizando a través de la infinidad de información que ha dejado, es un auténtico libro de historia; demás y si tomamos como ejemplo la Historia romana (la época romana) tienes a tu alcance una serie de escritos que te permitan conocer más detalladamente cuanto descubres y analizas, sin olvidar que al encontrar una moneda o un ánfora estos objetos te permiten conocer quién es el rostro que aparece en la moneda por la impresión (la leyenda) que lleva o, la referencia que gravada en la ánfora, con la que puedes conocer su procedencia y para qué se utilizaba.

Cuanto me dices, a pesar de mis dudas de si sabré "comprimirlo" y transmitirlo, me lleva a un mundo sugestivo y apasionante, porque hay más, ¿no es así?
Mucho más desde la aplicación que hacían del "teorema de Pitágoras" hasta infinidad de detalles que todo hallazgo te proporciona porque "todo" está ahí, cubierto por la tierra y en muchas ocasiones, intacto.

En realidad vuestro trabajo no solo consiste en descubrir y coleccionar sino que va más allá y requiere trabajar en equipo.
No basta con descubrir sino que es preciso analizar todos los detalles, incluso los materiales utilizados, todo hay que valorarlo de ahí la necesidad de contar con una equipo multidisciplinar para calibrar la importancia del "descubrimiento", nada queda al azar, todo se estudia, todo se analiza partiendo de un imprescindible trabajo de campo.

Trabajo que todavía sigues realizando.
Efectivamente y en Calascoves, en una cueva, en un santuario erigido en el siglo II antes de Cristo, en conmemoración de la fundación de Roma, por Rómulo y cada año, el 21 de abril, los magistrados de Maó acudían allí para celebrar dicha efemérides, un trabajo que empecé cuando era estudiante y en el que llevo ya 33 años. En el 96 fui nombrada codirectora, junto a otros dos directores, porque en este trabajo estamos implicados Menorca, Barcelona e Italia dado que la importancia de 'Pollentia' es mucha. Confío en que dentro de dos o tres años habremos acabado y con ello "cerraré", con toda posibilidad, mis trabajos de campo.

Descubrir el pasado, ¿ayuda a entender mejor el presente y los cambios operados?
Más que cambios, que los ha habido e importantes, lo que ha cambiado es la técnica. En la "Academia de Bellas Artes" de Granada, en el transcurso de una conferencia que pronuncié, expuse el siguiente ejemplo que considero sirve para "redondear" mis anteriores palabras: antaño, cuando se utilizaban las cocinas de carbón o a leña, las llamadas económicas, se utilizaban las cazuelas de siempre, pero cuando llegaron las cocinas de butano dichas cazuelas tuvieron que ser sustituidas porque se rompían o estallaban, pero la forma de la cazuela no cambió, lo que cambió fue el material, la técnica de fabricación. Con la llegada de las cocinas eléctricas sucedió igual y con la aparición de la vitrocerámica el proceso se repitió, nueva técnica, pero la misma forma.

En España, la asignatura pendiente ¿sigue siendo la cultura-educación?
Lo sigue siendo. Con cultura y educación todo cambia porque la ignorancia es "muy atrevida", lo que resulta diferente cuando tienes una base educativa-cultural. Particularmente cuando he de elegir a mis colaboradores les pregunto si saben decir "no lo sé", porque sin ésta premisa es difícil avanzar. El "lo se todo" no me convence.

En cuanto a los exámenes, de los que me has dicho que eres poco partidaria, ¿cómo actúas?
Actualmente los cursos que imparto son restringidos, de temas concretos y al final les pido a los alumnos que sean ellos los que me interroguen, que me expongan sus dudas y de ésta forma yo puedo saber lo que han asimilado y comprendido. Incluso les digo que yo aprendo de ellos y es así, porque creo que seguir aprendiendo siempre es posible.

Antes a Menorca se la denominaba "Museo al aire libre", hoy es "Reserva de la Biosfera". ¿Eslóganes o realidad?
Aunque falta algo importante, es una realidad. El menorquín "estima quant tenim" pero falta darle un nuevo enfoque, otra dimensión. Desde hace tres o cuatro años estoy o estamos insistiendo, desde el IME, con los políticos, que Menorca, con la riqueza arqueológica que posee, merece ser declarada Patrimonio de la Humanidad, objetivo en el que deberían volcarse ya que además de la relevancia cultural que ello representaría, aportaría una mejora sustancial de cara al turismo porque existe un turismo cultural que es muy sensible a visitar un determinado territorio cuando éste es declarado Patrimonio de la Humanidad.

Algo que con anterioridad ya se apuntó aunque fuera indirectamente.
Así es, en la década de los 50, Joan Hernández Mora organizó en el Ateneo, un ciclo de conferencias sobre Menorca, su historia, y pronunció una frase que yo utilizo con cierta frecuencia, "Menorca es la historia que se puede ver". Nuestro legado arqueológico es tan impresionante que justifica por si mismo la petición de ser designada Patrimonio de la Humanidad.

Lo cual reforzaría, muy considerablemente, la oferta turística.
Tenlo por seguro. En casos similares se ha comprobado que el turismo ha experimentado un aumento del 50 por ciento. En Ampúries, al socaire de las Olimpiadas del 92, el aumento de turismo fue espectacular y aquí también podría serlo, con una particularidad, el turismo cultural no es de temporada sino de todo el año, especialmente en aquellos meses menos utilizados por el turismo de sol y playas. Sin embargo no podemos olvidar que la cultura es cara, que el poner todo éste patrimonio en condiciones exige una inversión y es aquí cuando surgen las dudas entre quienes buscan la rentabilidad rápida más que una rentabilidad permanente que aportaría la oferta cultural.

La cual podría ser amplia y variada.
¡Imagínate!, desde visitar las taulas, talayots, Santa Agueda y demás monumentos, hasta la riqueza urbana de Ciutadella y de determinadas calles de Maó, hasta la temporada de ópera o la visita a los museos, Teatre Principal … variada, atractiva y muy completa.

La UIMIR, ¿ha desplegado todo su potencial?
Aunque desconozco muchos pormenores en torno a la UIMIR, yo diría que puede mejorar. Mi aportación se basa en la preparación de un curso que todavía carece de alumnos matriculados. La crisis, el hecho incuestionable de que desplazarse a Menorca resulta caro y el poco tiempo disponible para su difusión y por otras causas que ignoro son las causantes de ello, pero, la UIMIR tiene futuro, el reto es conseguir introducirla en los ámbitos universitarios y arroparla convenientemente.

¿Crees en la necesidad del mecenazgo?
La cultura es cara, desde el sueldo de los profesionales hasta la conservación de monumentos o museos pasando por el coste de los nuevos yacimientos arqueológicos, todo cuesta pero no se tiene en cuenta, pagamos por y para todo, no te digo para asistir a un partido de fútbol pero si para ir al cine, normal porque todo tiene un coste, pero la Cultura es considerada como si fuera de otra galaxia de ahí la necesidad del mecenazgo que en España no se ha sabido "vender" o explicar. No sucede como en EEUU en que las ventajas fiscales son importantes. Habrá que adoptar un sistema parecido y que éste llegue a quienes entiendan que contribuir a la cultura es apostar por el futuro, sin olvidar las ventajas fiscales que ello reporta.

La igualdad hombre-mujer, "dona-homo", ¿es real o existen lamentables diferencias?
Las diferencias que todavía existen son muchas, sobre todo en determinados tipos de sociedad, que llega a ser enorme entre el medio rural y el de las ciudades. Cuando dejemos de hablar de este tema será cuando habremos superado realmente este grave problema que afecta a una sociedad que blasona de liberal, abierta, igualitaria y de tantas otras cosas y casi a diario debe registrar lamentables casos de violencia machista.

Sin embargo no podemos olvidar que somos …
Diferentes, pero hemos de asumir dicha diversidad con respeto y desde ella, proyectar un futuro que sea nuestro, es decir, compartido entre el hombre y la mujer.

Me has dicho que eres miembro de la Academia de Bellas Artes de Granada.
Efectivamente y soy la única mujer que forma parte de dicha Academia, ahora bien, considero que estoy allí no por ser mujer sino por ser yo como persona.

Cuotas, ¿cuál es tu opinión al respeto?
Que son necesarias, no me seducen pero, repito, son necesarias. El día que la igualdad sea real, automáticamente desaparecerán porque serán innecesarias.

Haberte sumergido en la arqueología, ¿te acerca o separa de Dios?
No tiene en absoluto nada que ver; yo soy docente e investigadora.

Admirar el "Pergammon Moseun", o "Nefertiti" en el "Neues Museum", como otras innumerables obras que milagrosamente hemos "heredado", te anonada y me lleva a hacerte esta pregunta: ¿cuál es el secreto de su extraordinario trabajo?
La medida del tiempo. Para ellos el tiempo carecía de importancia, no contaba, lo que no nos ocurre a nosotros, y ahí radica la diferencia, en contabilizar el tiempo.

De este nuestro "perro mundo", ¿qué es lo que te horroriza?
La violencia, que haya gente que no pueda subsistir, el hambre, las diferencias sociales porque siento un enorme respeto por la justicia.

¿Cuál es el mejor consejo que has recibido?
No sé qué decirte, pero recuerdo que mis padres siempre me decían que ellos ya tenían su carrera finalizada, que ahora era yo la que debía "currármela".

Leí, con detenimiento, tu artículo publicado en éste diario sobre Maria Luisa Serra. Defínela esquemáticamente.
Como a una mujer valiente, fuerte con una enorme voluntad y una no menor capacidad de trabajo. Cuanto realizó no solo en el Museo o en el Archivo y Biblioteca y en el propio Ateneo demuestra quien era, una mujer que estaba siempre al día, en un tiempo muy diferente al nuestro en que todo resulta más fácil. Su legado, todo cuanto nos dejó, es de una importancia tal, que avalan su memoria.

Granada ¿sigue manteniendo su embrujo?
Más que la ciudad en sí, Granada tiene determinados barrios y "espacios" que la hacen especial. Durante un cierto tiempo fui presidenta de Amigos de La Alhambra y organicé diversas visitas a estos lugares emblemáticos, incluso pudimos acceder a determinados espacios no abiertos al público y nos dimos cuenta de su riqueza cultural y artística. La Alambra, el Generalife, la Catedral, la Capilla de Los Reyes, el Albahicín, con sus callejuelas empedradas y Sierra Nevada al fondo hacen que conserve su embrujo y la convierten en ciudad para "perderse".

Después de esta conversación, no entrevista, me permitirás que te diga que eres una mujer vital y vitalista y que conservas la facultad de sorprenderte, ¿es así o me equivoco?
Cada día sigo sorprendiéndome por mil cosas. Sí, conservo esta facultad y pretendo mantenerla a lo largo de toda mi vida.

Aunque tienes ante ti un largo camino por recorrer y muchos yacimientos por descubrir, ¿qué le pides a la vida?
Salud y no perder la ilusión por seguir aprendiendo.

La combinación de Calascoves y el embrujo de Granada harán posible que ambas peticiones de la arqueólogo menorquina Margarita Orfila se hagan realidad.