El presidente de la institución por su parte advirtió que la oposición "no marcará" la labor del gobierno pero sí "el tono de los debates y la intensidad de mis respuestas". - Javier

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El pleno del Consell insular aprobó ayer por unanimidad, en la primera sesión del mandato tras constituirse la nueva Corporación, el organigrama diseñado por el PP bajo la premisa del ahorro en el gasto público.

Un plenario que se preveía más como un trámite, para dar el visto bueno al cartapacio de la institución, pero en el que los grupos socialista y popular no pudieron evitar los reproches mutuos al abordar la situación económica y los recortes planteados por el gobierno de Santiago Tadeo.

Tanto el PSOE, con el ex presidente Marc Pons ahora como portavoz de su grupo en la oposición, como la consellera del PSM, Maite Salord, votaron a favor de la estructura del Consell. Pero mientras Salord realizó una defensa comedida del proyecto de autogobierno "menorquinista" de su partido, reclamando que la austeridad sea compatible con una gestión "eficaz, limpia y transparente" porque, afirmó, "lo que ha separado a los políticos de la ciudadanía es la corrupción", el socialista Marc Pons acusó a Tadeo de incumplir su primera y más importante promesa adquirida en el discurso de investidura: la de ahorrar cinco millones de euros con el recorte de cargos políticos.

"Nunca hubo 25 directores insulares y hace mucho que no hay 24, ustedes se encontraron 18 y una parte importante de la reducción de sueldos y de la reestructuración del organigrama ya la asumimos nosotros, no nos vendan la moto de trabajos que ya están hechos", espetó Pons al presidente del Consell, en alusión al reajuste aprobado en mayo de 2010.

El ahorro real que supone la nueva estructura es del 0,5 por ciento del Presupuesto total, según los cálculos del PSOE, afirmó Marc Pons, quien además criticó a Tadeo por querer ser, "el director de la orquesta y además el primer violín", en referencia a la asunción, por parte del presidente, de otra cartera de peso como es Ordenación del Territorio.

El presidente de la institución por su parte advirtió que la oposición "no marcará" la labor del gobierno pero sí "el tono de los debates y la intensidad de mis respuestas", y no tardó nada en repasar las cuentas para responder a las críticas de su antecesor, a quien acusó de haber generado, al frente del anterior gobierno, "una deuda descomunal" que incluso está provocando retrasos en el pago de las nóminas de los trabajadores de la Fundación para Personas con Discapacidad de Menorca.

"Me gustaría saber qué se intentaba hacer desde el anterior gobierno para no llegar a una situación así", aseguró Tadeo. En concreto los empleados de la Fundación han cobrado sus salarios del mes de junio pero sólo han percibido el 50 por ciento del importe de la paga extraordinaria debido a los problemas de liquidez del Consell.

Retrasos en los convenios turísticos y sociosanitarios

El presidente del Consell enumeró algunas de las cantidades pendientes de cobro, y acordadas mediante convenios, que forman parte de la deuda de otras administraciones con Menorca.

Así, Tadeo aseguró no entender "cómo es que no se firmó este año en FITUR el convenio con el IBATUR", por el que el Consell debe recibir 2.425.000 euros para la promoción en 2011. Mientras la consellera de Turismo, Salomé Cabrera, asentía con la cabeza las palabras del presidente, éste recordó que todavía no se han cobrado 1.200.000 euros del convenio para la promoción correspondientes al año pasado.

También se refirió el jefe del Ejecutivo a los convenio pendientes "en temas sociosanitarios", que suman una cantidad, correspondiente al ejercicio 2010, de 3,3 millones de euros.

"Sé que usted es consciente y esto es lo que nos hemos encontrado y con lo que estamos luchando", respondió Tadeo a la intervención de Marc Pons, quien previamente le había invitado a "sacar la calculadora".

Los números, según el presidente, son claros y el PP los realiza tomando como punto de partida el inicio del anterior mandato, en 2007, y del actual. Así, esgrimió Tadeo, la reducción de 25 a 12 plazas de directores insulares supone un ahorro de 3,4 millones de euros; el recorte de 11 a 9 consellers (ya que no se descarta todavía el nombramiento de un conseller no electo) ahorra 638.000 euros; la reducción de 5 a 3 dedicaciones parciales más de 300.000 euros; y con la supresión de gerencias se alcanza, según el PP, la cifra anunciada de 5 millones.