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Un velero de 12 metros de eslora quedó varado ayer en la playa de Cala Galdana para sorpresa de los bañistas y usuarios de la cala. Según informa un testigo presencial, el suceso se produjo sobre las 11.30 horas, cuando el propietario dejó el yate para desplazarse un rato a tierra. El temporal reinante de 'llebeig', que especialmente afecta a Cala Galdana, ocasionó la rotura del cabo del ancla, por lo que el viento arrastró el velero hasta la playa. El barco iba sin tripulación a bordo y quedó embarrancado a pocos metros de la orilla. Efectivos de Salvamento Marítimo, de Cruz Roja y los buzos de una empresa de buceo consiguieron remolcar el barco, que no sufrió desperfectos. También se desplazó la Policía Local de Ferreries. A las 14.40 horas, el velero pudo ser reflotado, sin que hubiera que lamentar daños.