APARCAMIENTO. El objetivo es facilitar el acceso a la cala virgen - Archivo

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El conseller de Movilidad y de Proyectos, Luis Alejandre, y el alcalde de Ferreries, Manuel Monerris, analizaron ayer 'in situ' los problemas de saturación del aparcamiento de Cala Mitjana con el objetivo de plantear posibles soluciones para facilitar el acceso a la cala.

Los representantes del Consell y el Ayuntamiento se reunieron a partir de las 17 horas en el Ayuntamiento de Ferreries para estudiar anteriores e informes de tráfico, seguridad, aforo y protección legal del entorno.

Posteriormente, decidieron trasladarse hasta la zona para constatar sobre el terreno las dificultades provocadas por la masificación durante la temporada estival y que se concentran especialmente en el mes de agosto.

Durante la visita a la zona también estuvieron presentes el concejal de Urbanismo, Vicent Coll, y los directores insulares de Proyectos, Ordenación del Territorio y Movilidad, Juan Mascaró Sintes, María Paz de Mañes y Tomeu Martí, respectivamente.

No obstante, fuentes de la institución insular aseguraron que, aunque se valoraron diversas opciones, no se tomó ninguna decisión concreta.

Antes de hacerlo, el Consell volverá a reunirse con la familia De Olives, un encuentro durante el que se pretende trasladar a la propiedad de Cala Mitjana las posibles alternativas para hacer frente a la saturación en la zona de estacionamiento de la cala que cuenta actualmente con 150 plazas.

Alejandre ya se entrevistó el pasado martes con los De Olives, un primer encuentro durante el que se propuso sin éxito la construcción de un aparcamiento alternativo, que tropezaría con la capacidad que tiene la playa.

El GOB reclama alejar el aparcamiento de la playa

El GOB se reunirá el próximo martes con Alejandre con la finalidad de trasladar su preocupación en relación a la construcción de un nuevo aparcamiento en Cala Mitjana.

La organización ecologista considera que la solución pasa por reubicar la actual zona de estacionamiento de los vehículos, alejándola de la playa.

"En contra de los criterios aplicados en el resto de la Isla, que recomiendan ubicar los aparcamientos de las calas vírgenes a una cierta distancia de la playa, la zona de estacionamiento de Cala Mitjana se habilitó justo al lado de la playa", lamentan desde la entidad.

El GOB achaca a este desacierto la masificación del arenal que, según apuntan, registra una presión superior a la recomendable durante el verano.

En este punto, los ecologistas opinan que responder a la problemática construyendo un nuevo aparcamiento conllevaría un agravamiento la situación. "300 vehículos más supondría unas 1.000 personas más que, sencillamente, no caben en Cala Mitjana", matizan.