Compras. El ritmo de compra de libros está siendo elevado en estos primeros días - Javier

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Los más pequeños apuran ya sus últimas semanas de vacaciones tras más de dos meses disfrutando de las bondades del verano. El próximo 12 de septiembre los escolares partirán rumbo al colegio con la ilusión de empezar un nuevo curso y reencontrarse con sus compañeros.

A casi tres semanas de la vuelta, muchos padres andan ya calculadora en mano tratando de prever cuánto les costará el regreso de sus hijos a las aulas. Aún más, cuando en estos días salen ya a la venta los libros de texto, sin duda, la parte más costosa del esperado retorno a las clases.

Este año las editoriales apenas han introducido novedades, lo que facilita la reutilización de los libros, una vieja moda económica y a la vez ecológica. "No ha habido grandes reformas en cuanto a los libros de texto. Únicamente nuevas ediciones en libros de primer ciclo de Primaria y de primero y tercero de ESO", explican en la librería Didasko. Unas ediciones orientadas a velar por la salud de los más pequeños. Las editoriales editan los libros de texto en tres cuadernillos separados, uno para cada trimestre del curso con el fin de aligerar las mochilas de los escolares.

Quizás queriéndose adelantar a la ya bautizada como "cuesta de septiembre", algunos no han querido esperar demasiado para acercarse a las librerías y "quitarse de encima" un gasto inevitable pero muy caro. "En los primeros días siempre hay una gran afluencia de gente. Muchos prefieren no esperar demasiado", explican en Didasko.

Aunque es difícil establecer una media de gasto dedicado a la compra de los libros de texto, difícilmente se baja de los 200 euros por alumno a partir de Primaria. "Es complicado fijar una media porque lo cierto es que hay mucha diferencia entre las escuelas. Podemos hablar de hasta 100 euros de diferencia", explica Mónica, de la Llibreria Papereria Ronda. Además, confirma el buen ritmo de las ventas. "Nosotros, a medida que llegan los libros avisamos a los padres vía mensaje al móvil. Suelen venir con rapidez. Prefieren quitárselo de en medio cuanto antes".

En estos días, quienes más equilibrios han de hacer son los padres de familia numerosa. Toni, de Maó, acudió ayer a comprar los libros de su hija de 10 años, que este año cursará sexto de Primaria. "Me han costado 200 euros y tengo dos hijas mayores que también están en edad escolar y que próximamente tendrán que comprar también sus libros", explicaba. "Septiembre es un mes criminal. Por eso, cuanto antes mejor", sentenciaba.
Cristina, con una hija a las puertas de empezar cuarto de ESO, hizo un desembolso ayer de 277 euros. Un gasto elevado pero que no le sorprende. "Ya estoy acostumbrada de cada año", afirmaba, al tiempo que lamentaba que solo había podido aprovechar un libro de lectura de su hijo mayor, ahora ya universitario.

Beatriz, a punto de iniciar segundo de Bachillerato, confesaba haberse gastado 241 euros y aseguraba que lo de la reutilización no le ha pasado por la cabeza.

Al gasto obligado en libros, ha de sumarse el del material escolar. Los personajes de los dibujos animados más populares están presentes en carpetas, estuches y libretas. Un atractivo ante el que los pequeños apenas pueden resistirse y ante el que los padres se ven casi obligados, una vez más, a echar mano de la cartera.