El Govern adeuda al Geriátrico de Es Mercadal 166.000 euros correspondientes a las últimas nueve mensualidades de las plazas destinadas a personas dependientes, según informó ayer el alcalde de Es Mercadal, Francesc Ametller.
La morosidad de la Administración autonómica obliga al Ayuntamiento de la localidad a adelantar esta cantidad a la gestora de la residencia y a retrasar las obras de mejora previstas en el centro por falta de fondos. Además está provocando problemas en la tesorería municipal.
La residencia cuenta con un total de 19 plazas, 15 de ellas son para personas dependientes y están conveniadas con el Govern y el Consell tras la entrada en vigor de la Ley de Dependencia gracias a un acuerdo con el Ayuntamiento. El resto, depende directamente del Consistorio. El problema al que se enfrenta el Ayuntamiento, según Ametller, es que las cuentas no salen.
533.000 euros anuales
El alcalde explica que el Consistorio de Es Mercadal tiene suscrito un contrato con la empresa gestora del Geriátrico, Instituto de Trabajo y Servicios Sociales (Intress) por un importe anual de 533.000 euros, de los cuales el Govern aporta 222.000 euros correspondientes a las plazas de dependencia, el Consell abona otros 36.000 euros, mientras que los propios residentes pagan 122.400 euros y el Ayuntamiento otros 153.000 euros.
Sin embargo, según advierte Ametller, el Govern lleva nueve meses sin pagar su parte proporcional, a razón de 18.500 euros mensuales, en total 166.000 euros, mientras que Consell, comenta, abona la suya -unos 3.000 euros al mes- mediante compensaciones, es decir, el Ayuntamiento descuenta estas cantidades de las deudas que mantiene con la institución insular.
El Consistorio se ve obligado a hacer frente a las obligaciones económicas para con las gestora mediante abonos a 60 y 90 días. "Pagamos cuando nos presentan las facturas trimestrales. Pero cuando uno falla, el castillo de naipes cae. Cada Administración debe cumplir su parte. El Govern no nos paga, pero nosotros debemos hacer frente a las facturas del Geriátrico, lo que nos está causando problemas de tesorería al asumir pagos de otros que no estaban previstos", explica.
La morosidad de la Administración autonómica está provocando, según el regidor, que no se puedan acometer en la residencia algunas obras de mejora planificadas como la ampliación de la cocina y la climatización de las salas.
Ametller responde así a la denuncia pública realizada al "Menorca" por un familiar sobre la falta de aire acondicionado en el centro. Explica al respecto que el Consistorio ha invertido recientemente 40.000 euros en la reforma del embaldosado del piso superior y en pintar el edificio. Pero aún quedan pendientes otros dos proyectos ya presupuestados, como la climatización del centro por un importe de 38.000 euros y la ampliación de la cocina, con una inversión prevista de 55.000 euros.
El alcalde asevera que al fallar la financiación autonómica, el Ayuntamiento tiene las manos atadas y está a la espera de que el Consell convoque las ayudas del plan de equipamientos sociales, culturales y educativos para acometer las inversiones.
A través de este plan el Ayuntamiento lograría que el Consell financiara, al menos, el 50 por ciento de los proyectos y el resto correría a cargo del Ayuntamiento, de esta forma las arcas municipales no soportarían todo el peso económico de las remodelaciones previstas.
"Para nosotros las mejoras son prioritarias y la dirección del Geriátrico los sabe", remarca el alcalde, quien añade que la morosidad de la Administración autonómica está afectando también gravemente a otros departamentos municipales.
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