El salón del automóvil registró menos afluencia que otros años - Gemma Andreu

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La Feria de Automóvil se clausuró ayer en Maó sin cifras oficiales de asistencia y con mucho trabajo por delante, el que deberán realizar los comerciales de los concesionarios en las próximas semanas para que las consultas realizadas por los potenciales clientes fragüen y se traduzcan en ventas. Media hora antes de que se cerraran las puertas del Recinto Ferial las empresas se preparaban para desmontar y hacer balance de la muestra, que ha reunido 17 marcas de vehículos.

El vicepresidente de la Asociación de Concesionarios del Automóvil, Rafael Florit, confirmó la impresión de las jornadas anteriores de que la afluencia de visitantes ha sido "bastante menor" que en ediciones anteriores, pese a que este año la entrada era gratuita y en pasadas convocatorias se cobraba un euro; una recaudación, recordó Florit, que se destinaba como donativo a entidades sociales de la Isla.

Asimismo, el interés de los consumidores se ha concentrado en utilitarios y no en vehículos de gama alta.

La caída de ventas de automóviles a particulares experimentada este año -un 41,17 por ciento hasta el mes de octubre y en relación a 2010-, ha obligado a las empresas concesionarias a "reducir todos los gastos posibles" y a recortar plantillas, aunque no se han producido cierres, según señaló Florit.

El vicepresidente de los concesionarios manifestó que, desde las asociaciones de ámbito estatal, se han hecho llegar propuestas a los partidos políticos para que el futuro Gobierno tome medidas que reactiven el sector. Así, los empresarios del automóvil plantean que se estudie una posible bajada del IVA o la exención del Impuesto de Matriculación, además de la puesta en marcha de un nuevo plan de ayudas a la compra para achatarrar vehículos, como el Prever.

En opinión de Florit, el parque automovilístico actual en Menorca es anticuado, algo que no sólo repercute en las cifras negativas de ventas de los concesionarios sino también en el medio ambiente, porque los vehículos con más años también son más contaminantes. Las dimensiones de la red viaria insular, con unas distancias reducidas, permiten que los particulares alarguen la vida de sus turismos, y más en las condiciones de crisis actuales.