El PSOE resta toda credibilidad al informe sobre la Fundació

La consellera socialista Noemí Gomila expuso ayer su preocupación por el hecho que se puedan adoptar decisiones drásticas sobre el futuro de la entidad en función de un informe anónimo, sin una estructura adecuada para este cometido y con omisiones de datos importantes, como los derechos de cobro que tiene pendientes la Fundació (deudas a su favor) o el patrimonio de que dispone (unos 1,6 millones de euros que llegaron con la absorción de ASIMPROS).

Gomila insistió mucho en el hecho de que se trate de un informe no firmado ni atribuido a ninguna empresa, "no sabemos quién es su responsable, por lo que nos crea dudas sobre su solvencia". La consellera argumentó que el documento trata a la Fundació como una empresa y solicitó que se envíe al colegio de economistas para que lo revise "porque están sobre la mesa cuestiones muy importantes y muy sensibles". "Es altamente sesgado", concluyó.

Noemí Gomila no comprende por qué motivo no se contó para la elaboración del informe con el auditor habitual de la Fundació e incluso se sorprendió de que un economista como el presidente del Consell, Santiago Tadeo, no le hubiera echado una ojeada. "Esta manera de hacer las cosas no se las merecen los trabajadores".

El conseller Joan Marqués añadió que advertencias tan graves como la alta deuda (4 millones de euros) o el riesgo de embargo no se justifican por el contenido del informe. "Esto no es un informe económico", concluyeron los representantes socialistas.

En otro orden de cosas, Gomila mostró su honda preocupación por el hecho que la responsable del área social, Aurora Herráiz, no aclarara en el pleno del lunes si está firmado o no el convenio con el Govern para la financiación de los servicios que presta la Fundació correspondiente a 2011 y que ascendería a unos dos millones de euros.

Gomila explica que dejó el convenio de 2010 firmado pero pendiente de cobro, "y le dije a la actual consellera que lo importante era trabajar en el cobro de este dinero", y que el documento correspondiente a este año se debe firmar antes del 31 de diciembre, "para luego poder ir a reclamar". "No sabemos si se ha firmado o no, y esto sí que es algo grave, sería una negligencia de la consellera, es una fuente básica de ingresos para la Fundació que podría no existir", añadió Gomila.

Sobre la tensión generada entorno a la Fundació, Gomila considera "innecesario e injusto llenar de incertidumbre y angustia a los usuarios y sus familias".

Desmiente que solo una empresa estuviera al día en los cobros

La consellera Noemí Gomila negó con rotundidad una de las acusaciones vertidas, en su opinión "fuera de contexto", por la responsable del área social del equipo de gobierno del Consell, Aurora Herráiz, y que hacía referencia a que solo una empresa estaría al día en los cobros desde de la Fundació, una empresas que precisamente está participada por una exconsellera socialista.

Gomila explicó que son varias las empresas que tienen los cobros domiciliados y al día, y puso como ejemplo los propietarios de los alquileres de los locales de que dispone la entidad. La socialista informó que la facturación de la empresa de la exconsellera del PSOE es muy reducida y que al aportar solo trabajadores, concretamente de limpieza, era considerada como prioritaria a la hora de satisfacer las facturas.

En cuanto al centro de Milà, aseguró que está en óptimas condiciones y que si se han visto ratas en el edificio "es porque está en el campo".