Gabriel Company, Margaret Mercadal y Fernando Villalonga escucharon las preocupaciones de las tres cofradías de la Isla - CAIB

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La Conselleria de Agricultura, Medio Ambiente y Territorio del Govern pagará las ayudas que adeuda aun al sector primario a través de la figura financiera del 'confirming' que permitirá avanzar la cuantía de inmediato a cambio del pago de unos intereses al banco o, por el contrario, transferir la partida sin más prórrogas en un plazo máximo de 90 días desde el momento en que firme la operación.

Este servicio financiero será el que el Govern utilizará para pagar los 629.000 euros correspondientes al Proagro 2010 que debía percibir el sector ganadero menorquín el pasado ejercicio. No obstante, una falta de liquidez de la Comunidad Autónoma ha hecho imposible el pago de estas ayudas que debían de hacerse efectivas antes del 30 de noviembre. Pero la situación no es así de simple. Y es que la ayuda podría llegar unos cinco meses más tarde que el resto de Balears.

Según explica el conseller de Agricultura del Ejecutivo autonómico, Gabriel Company, "el anterior equipo de gobierno del Consell rubricó un convenio con el Ejecutivo balear a través del que la ayuda del Proagro se ingresaba de forma global al Consell para que éste lo abonara e "hiciera sus tejemanejes con la ayuda", señala y añade que "quería diferenciación total con Mallorca y Eivissa cuando son unas ayudas que deben ingresarse de forma completamente horizontal".

La difícil situación económica por la que pasan las administraciones unido a la existencia de este convenio que pone a la cola la cuantía para Menorca respecto a la destinada al resto del archipiélago podría ser motivo por el que "el cobro de la partida se retrasara". Company resaltó que su homólogo menorquín, Fernando Villalonga, "está trabajando para que los ganaderos de la Isla puedan recibir la ayuda en el mismo momento que el resto de Balears, y esperamos que se solucione, aunque existen dificultades legales para ello". La partida total incluye dos convenios, uno de ellos por valor de 575.000 euros y otro de unos 54.000 euros, según informa Villalonga.

Por otra parte, el responsable autonómico en Agricultura advirtió que "las ayudas 2013-2020 están en proceso de negociación en la Unión Europea" en un marco de situación de crisis que ya insinúa que "el volumen no será el mismo, habrá aportación pero en menor cantidad".

Cofradías de pescadores
El conseller balear de Agricultura, Gabriel Company; la directora general de Medio Rural y Marino, Margaret Mercadal y el conseller menorquín, Fernando Villalonga, se reunieron ayer con el sector pesquero para acercar posturas y escuchar las principales preocupaciones y dificultades con las que deben lidiar los pescadores de la Isla. La principal intranquilidad del sector fue la bonificación que el Govern tiene aun pendiente con las tres cofradías para su funcionamiento. Company aseguró que el próxima semana se va a formalizar otro 'confirming'. "Con esta figura bancaria, la fecha de pago está asegurada", indica el conseller balear, puesto que, las cofradías pueden cobrar la cuantía de inmediato a cambio de intereses o pueden esperar 90 días cuando el ingreso se hará efectivo sin más demoras.

El Govern debe a cada cofradía una media de 16.000 euros a las que hay que sumar otros 9.000 euros procedentes del Consell, unas cuantías que varían ligeramente según la cofradía.

Esta noticia fue recibida con mucha satisfacción por los tres patrones mayores, quienes dudaban de que la ayuda llegara. Además de ello, valoran en positivo que el conseller Company garantizara, en el transcurso de la reunión mantenida ayer en la Casa del Mar, una partida similar para 2012. Según el presidente de la Cofradía de Pescadores de Ciutadella, Josep Caules, "si nos quitaran la ayuda podríamos poner el candado, muchas cofradías lo están pasando francamente mal por dicho retraso", a lo que añade que "en Ciutadella ya nos veíamos venir el chaparrón y desarrollamos una política de austeridad y de contención que nos ha ayudado a seguir navegando", resalta.

Diferente es el caso de la Cofradía de Pescadores de Maó que la falta de liquidez obligó a firmar un préstamo por valor de 20.000 euros. "El cobro de la ayuda se destinará a liquidar el crédito", señala el patrón mayor, Pito Quintana, quien añade a su vez que la reunión con el conseller balear y su homólogo menorquín "ha constatado que la administración está concienciada, es un gran gestor y ha demostrado no actuar de político".

Por su parte, el presidente de la Cofradía de Pescadores de Fornells, Aleix Riera, trasladó al conseller su "descontento" con la falta de comunicación del Govern durante estos siete meses "sin contar tan siquiera con un teléfono de contacto con quien consultar dudas o problemas", explica Riera.

La reunión sirvió a su vez para tratar la regulación de la pesca de erizos de mar, la preservación del Canal de Menorca o las competencias sobre marisqueo que a día de hoy están en manos del Consell. También se habló de la necesidad de mejorar la formación y la promoción del sector así como la posibilidad de procurar una pesca intensiva desde el punto de vista de la sostenibilidad, equilibrada en materia medioambiental, social y económica. También se planteó la alta cuota, en relación al resto de la Península, que pagan los pescadores de la Comunidad Autónoma a Ports de Balears por número de capturas, así como de la competencia desleal que existe en el sector. Además, el conseller se comprometió a celebrar una reunión con todas las cofradías de Balears y con la Federación Balear para aunar esfuerzos y luchar unidos.

Gabriel Company animó al sector a emprender acciones por su propio pie puesto que "aunque la administración debe apoyar es el propio sector quien ha de orientarse y posicionarse en el mercado".