Cabello. El misionero ofreció ayer la primera charla cuaresmal en la parroquia de La Concepción - Javier

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La inexistencia de jóvenes que participen en la vida parroquial de Maó y un conocimiento poco actualizado del Evangelio han llevado al Arciprestazgo de Maó a tomar cartas en el asunto. En su búsqueda por dinamizar las iglesias del municipio han contactado con la Congregación del Santísimo Redentor, dedicada especialmente a la reflexión en cuestiones de moral.

El misionero redentorista Manuel Cabello ha respondido a la llamada de los sacerdotes mahoneses y mañana a las 20.30 horas se reunirá con los consejos parroquiales de Maó en la iglesia de Sant Antoni con la finalidad de dar a conocer la misión de evangelización que la congregación ha desarrollado en diversos puntos de España y Sudamérica.
Durante su visita a Menorca, Cabello aprovechará para dirigir dos charlas cuaresmales. La primera de ellas tuvo lugar ayer por la tarde bajo el título "La Eucaristía como camino y cumbre de la Cuaresma". La segunda sesión se celebrará hoy a las 20.30 horas en la parroquia de La Concepción y versará sobre "La vida en plenitud en tiempos de crisis".

Su objetivo como misionero redentorista es propagar el Evangelio fuera de la Iglesia. ¿Cómo se consigue?
Disponemos de un método de evangelización extraordinario, es decir, de una ayuda temporal y puntual. Se trata de un proceso de tres etapas y que puede durar dos, tres o cuatro años.

¿En qué consiste la primera fase?
Es una etapa de preparación y de análisis de realidad. Posteriormente llega la segunda fase, que tiene una duración de 17 días intensivos durante los cuales los misioneros desarrollamos el programa establecido durante la primera etapa.
¿Qué tipo de actuaciones se llevan a cabo durante estas poco más de dos semanas?
Durante la primera semana se llevan a cabo asambleas familiares cristianas, reuniones en casas particulares durante las que se tratan cuestiones de la vida a la luz de la fe.

¿Cómo logran entrar en las casas?
Nos basamos en el tú a tú, visitando a todas las familias del territorio parroquial para invitarles a participar en esta actuación. Hay que dejar de lado los miedos para llamar a las puertas. Se trata de utilizar nuevos lenguajes, nuevas maneras y nuevas estrategias. Durante la segunda semana nos centramos en el anuncio de la Palabra. Se realizan otro tipos de encuentros con niños, jóvenes, matrimonios o personas mayores, así como visitas a enfermos o a centros educativos.

¿Se trata de "vender" la Iglesia?
No vendemos, ofrecemos el Evangelio y a Jesucristo. En términos comerciales, buscamos otra manera de que el mercado disfrute de un producto. Tenemos un gran regalo que es el Evangelio pero hasta el momento no hemos sabido venderlo bien. Hemos hecho lo contrario que El Corte Inglés, que por Navidad prepara unos paquetes preciosos pero están vacíos. Hay que conseguir que nuestro producto sea más cercano porque nadie elige aquello que no conoce.

¿Que porcentaje de éxito tienen?
Es complicado. En temas relacionados con la fe las matemáticas son muy relativas. Si buscamos el 80 por ciento de éxito no lo vamos a conseguir, eso ya lo sabemos. Tal vez no conseguimos que más gente asista a la Eucarística pero logramos que la que ya iba tome otra conciencia.

¿Despertar la fe dormida?
Exacto. Hay gente que va a misa todos los días pero lo hace por rutina. Esta gente necesita refrescar su fe y darle un nuevo contenido. Otro de nuestros objetivos es detectar nuevos colaboradores. Muchas personas asisten a la Iglesia como espectadores y tal vez nadie les ha dicho nunca que tienen aptitudes para trabajar como voluntarios o educadores de jóvenes. Hay que tener claro que la Iglesia es de todos los laicos y no tan sólo de los sacerdotes.

¿Estas actividades se dirigen únicamente a los creyentes?
A día de hoy todo gira en torno al sacerdote. Parece que sin el párroco no pueden desarrollarse reuniones cristianas o de oración. Posiblemente no hemos educado bien en este sentido y, por ello, este método pretende concienciar a la gente de que todos somos responsables. Nuestra intención es trabajar juntos para que la familia crezca y sea útil.