Ernesto Riudavets Vidal - Javier

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Autoficha
Me llamo Ernesto Riudavets Vidal, tengo 41 años, y soy de Es Castell. Soy cocinero y tengo mi propia crepería. Estoy soltero y tengo una hija de cuatro años. Cuando dispongo de tiempo libre me gusta la fotografía, las redes sociales, y viajar.

Dice que siempre había sido agente comercial. Desde hace quince años trabaja en una crepería. ¿Cómo da ese salto?
Decidí abrir una crepería junto a unos amigos, lo que pasa es que al final me la quedé yo. Aprendí a hacer crepes yo solo, soy autodidacta. Lo mejor de tener tu negocio es que eres tu propio jefe. Lo que no me gusta es cuando te encuentras con algunos clientes a los que les falta simpatía o son un poco desagradecidos.

Casi todo el mundo ha intentado hacer crepes en casa. ¿Algún secreto para que salgan ricos?
Los míos llevan siete ingredientes, entre ellos, una buena harina, Grand Marnier, vainilla, canela y cerveza. Es una receta especial que conseguí haciendo pruebas yo mismo. Hay quien me pregunta si no estoy cansado de hacer tantos crepes pero yo les digo que seguiré haciéndolos mientras no me toque la lotería.

¿Qué crepes son los más solicitados y cuál es su preferido?
El que más me gusta es el de pollo con roquefort, que además es uno de los que más se piden. También se venden bien los de cuatro quesos, el de Grand Marnier, el de nueces con roquefort y, por supuesto, los crepes dulces.

¿Alguna anécdota con la clientela?
En una ocasión en la que ya había cerrado y lo tenía todo limpio, se acercaron unas chicas y me suplicaron que les hiciera crepes. Estuve como media hora diciéndoles que ya había cerrado pero insistieron tanto que les dije "Si alguna estuviera embarazada, lo haría". Una de ellas se desabrochó la chaqueta y me enseñó la barriga. Así que tuve que abrir y les hice crepes. Todo sea por el antojo... Luego me dijeron que eran unas sobrinas de la Duquesa de Alba.


Usted ha viajado bastante. ¿En qué lugares ha estado?
Ahora hace cuatro años que no salgo porque tengo a mi hija, pero años atrás visité Brasil, Miami, Marruecos, Túnez, y he estado en casi toda España. Uno de los sitios que más me fascina es Marruecos, donde he estado ocho veces. Me encanta por sus gentes y su amabilidad. Allí me siento más seguro que en Las Ramblas de Barcelona. Túnez también me gusta aunque es muy turístico. Creo que en Menorca lo que necesitamos son más profesionales, buenas conexiones aéreas y que los políticos cambien el chip. Tienen que darse cuenta de que necesitamos gente porque prácticamente todos vivimos del turismo.

¿Algún viaje a la vista?
Si todo va bien, este invierno quiero ir a China con una amiga que vive en Palma.