El Hospital Mateu Orfila se ha quedado sin el único cardiólogo que tenía en plantilla tras la jubilación el pasado viernes del doctor Carlos Sánchez Lafraya.
A finales de abril el Govern convocó un concurso oposición para cubrir las dos vacantes de esta especialidad que mantiene abiertas el Hospital correspondientes a la Oferta Pública de Empleo de 2009, pero ambas plazas siguen sin ser ocupadas a día de hoy. La solución a este problema se augura harto difícil.
No obstante, el Área de Salud de Menorca insiste que la asistencia médica en esta especialidad está garantizada en la Isla. Las consultas ordinarias con casos de arritmia e insuficiencia cardiaca, entre otras patologías, están siendo atendidas por el servicio de Medicina Interna del 'Mateu Orfila', mientras que las exploraciones complementarias son cubiertas por la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI). Cabe recordar que precisamente ambos servicios fueron los encargados hace apenas un año de cubrir la baja por enfermedad del propio doctor Sánchez Lafraya.
Por tanto, la situación no es nueva. La prolongada ausencia de este cardiólogo, su entonces cercana jubilación y el hecho de que en aquellas fechas ni siquiera se hubieran convocado las dos plazas vacantes en esta especialidad provocó las quejas del sindicato médico y la movilización de la Asociación de Consumidores y Amas de Casa. Esta entidad llegó a organizar en señal de protesta una recogida de firmas reivindicativa bajo el lema "Cardiólogo ¡Ya en 2011!" Incluso la dirección del Hospital intentó cubrir esta especialidad al margen de las oposiciones ya en ciernes en una búsqueda desesperada.
Hay que tener en cuenta que Sánchez Lafraya ocupaba una plaza de medicina interna aunque ejercía como cardiólogo. Se da la paradoja de que si las plazas vacantes en esta especialidad se hubieran ocupado a su debido tiempo, el Hospital hubiera tenido durante algún tiempo hasta tres cardiólogos, uno por encima de plantilla.
Desde Palma
De momento, el Área de Salud de Menorca matiza que a diferencia de situaciones precedentes, las dos plazas de cardiología ya están convocadas y avanza que se llevan a cabo entrevistas y un candidato ya ha realizado una prueba. Además, remarca que el Hospital firmó el 30 de enero de 2010 un concierto con la Clínica Menorca de Ciutadella para reforzar este servicio en la Isla.
Un cardiólogo se desplaza desde Palma y ofrece desde entonces esta cobertura médica en función de la demanda. Sus estancias en la Isla no tienen una periodicidad fija, pero las consultas permiten dar fluidez a las listas de espera. Este desplazamiento no obstante, es observado con cierto recelo por algunas entidades de la Isla al no generar la necesaria confianza que consideran debe existir entre un médico y su paciente y mantienen la petición de un especialista permanente.
A pesar de la falta de cardiólogo, la atención especializada en el 'Mateu Orfila' ha mejorado en los últimos años aunque sigue aquejada de una fuerte inestabilidad y elevada rotación.
Las cuatro plazas de Oncología están ocupadas, en Cirugía se han consolidado varias plazas, e incluso en Neumología y Pediatría el centro cuenta hoy día con un médico por encima de plantilla.
Además, la nueva dirección del Hospital ha anunciado en varias ocasiones que trabaja para que sean los especialistas y no los pacientes y sus familias quienes deban trasladarse a Palma para se atendidos, no solo por cuestiones económicas, sino porque el paciente normalmente no está en las mejores condiciones para viajar.
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