Ciutadella. El TSJB no apoya la concentración de todos los juzgados en Maó - Cris

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El presidente del Tribunal Superior de Justicia de Balears (TSJB), Antoni Terrassa, defendió ayer la conservación de las dos actuales unidades judiciales de Menorca a pesar de que finalmente se apruebe la reorganización que pretende llevar a cabo el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) con el fin de reducir los partidos judiciales en España. Esta reforma afectaría especialmente a Menorca puesto que plantea aglutinar los juzgados de Maó y Ciutadella en una única demarcación judicial.

El informe elaborado por el TSJB, que será remitido en breve al CGPJ, aprueba el nuevo diseño territorial ya que, según afirmó el presidente de la máxima institución judicial de Balears, responde a un objetivo modernizador y a un aprovechamiento optimizado del personal, las instalaciones y los recursos comunes, lo que se traducirá en una gestión más ágil y eficiente de los trámites procesales.

No obstante, Terrassa consideró que Menorca, por su condición insular, no se acomoda con fidelidad a los criterios tomados como base para la propuesta de nueva demarcación territorial, especialmente el que se refiere a la exigencia de una mínima población cifrada en 100.000 habitantes. "Este criterio dista de compadecerse con la actual realidad estadística sobre población de derecho en toda Menorca, que es inferior", reza el texto elaborado por la Sala de Gobierno del TSJB.

Además, Terrassa indicó que tampoco puede cumplirse la previsión de agrupar como mínimo ocho juzgados, dado que a día de hoy la Isla tan sólo se cuenta con tres juzgados mixtos o no especializados en Maó y otros dos en Ciutadella. "Ni sumándolos para aglutinarlos en una sola localización se lograría cumplir este objetivo", subrayó el presidente del TSJB.

En esta línea, recordó que la propuesta de nueva demarcación judicial no incluye el resto de órganos judiciales de Menorca (el Juzgado de lo Penal con sede en Maó y el Juzgado de lo Social de Ciutadella), aunque, tal y como resaltó Terrassa, esta es la fase inicial de un largo proceso para el análisis y la reflexión que de momento de limita a los Juzgados de Primera Instancia y de Instrucción.

Sin embargo, el presidente del Tribunal señaló que el natural ámbito de competencia territorial "provincial" tanto del Juzgado de lo Penal como del de lo Social "resulta menguada y reducida a la isla de Menorca por indeclinables exigencias derivadas de la insularidad".

Terrassa apostó por mantener las dos sedes judiciales de la Isla, independientemente de la clase de órganos a radicar en cada una de ambas localizaciones haciendo referencia también a elementos de carácter geopolítico y geoeconómico propiciados por el cambio de capitalidad entre Ciutadella y Maó.

El presidente del TSJIB concluyó que la alternativa propuesta por la Sala del Gobierno respeta la facilidad de comunicación por la posibilidad de desplazamiento en menos de una hora entre las dos ciudades y, además, permite incorporar institucionalmente las vertientes que responden a influencias y sensibilidad de orden histórico, sociopolítico y geoeconómico.

De Sintas espera resignado

La voz del alcalde de Ciutadella, José María de Sintas, sonaba ayer por la tarde cansada. No había tenido la oportunidad de leer con detenimiento la noticia relativa a la propuesta del TSJB de mantener las dos sedes judiciales de Menorca aunque, según indicó, conocía con antemano la intención de Terrassa de no apoyar la unificación de las unidades de Maó y Ciutadella.

El primer edil sabe que la batalla no está ganada aunque espera que las conclusiones del informe del TSJB tengan el peso que se merecen y sean consideradas por el CGPJ. En caso contrario, De Sintas asegura que "seguiremos luchando".

El alcalde parece hastiado: "Siempre me toca a mí, yo no quiero hacer una batalla pero llega un momento en que tengo que defender los intereses de los ciutadellencs". En este sentido, se refirió a los alrededor de cuarenta funcionarios que trabajan en la sede judicial de Ciutadella y que, si se aglutinasen los juzgados en Maó, deberían trasladarse diariamente, así como los procuradores y abogados también residentes en el municipio de Ponent.

Asimismo, consideró que el nuevo edificio judicial de Maó no tiene suficiente capacidad como para acoger los juzgados de Ciutadella. "Volveríamos a estar apelotonados de nuevo", subrayó.