En bici. La colorida fiesta de las dos ruedas reunió a familias enteras, algunas con curiosos disfraces - Gemma Andreu

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Maó recuperó ayer con éxito de participación la gran fiesta de la bicicleta. Alrededor de 460 personas, entre las que se encontraban familias enteras, junto a cicloturistas habituales, recorrieron un circuito urbano animados por unas temperaturas casi veraniegas.

La salida tuvo lugar en la Plaça Constitució. Dando ejemplo, la alcaldesa, Águeda Reynés, y los concejales de Deportes y Cultura del Ayuntamiento, equipados para la ocasión, junto al presidente de la Federación Balear de Ciclismo, Arturo Sintes, cortaron la tradicional cinta. Sant Roc, Camí de Trepucó y el carril-bici de la carretera de Sant Lluís, fueron algunos de los lugares por donde trascurrió la colorida fiesta.

Sintes, responsable de la prueba, se mostró animado por la posibilidad de llegar en próximas ediciones a los 600 participantes. "Mi objetivo es motivar a que se hagan grupos de familias y de colegios para llegar a estas cifras", señaló. Sintes destacó el ejemplo dado por la alcaldesa y por Peter Whale, un inglés de 62 años propietario de una casa en Sant Antoni que viajó expresamente a la Isla desde Inglaterra para participar.

Al finalizar también hubo premios. Los trofeos para los más mayores fueron para Ramón Reynés de 73 años; Vicente Huguet, de 69 años y Pedro Trenado, de 64 años. Los más pequeños en terminar fueron Iker Yañez, de 3 años; César Villalonga, de 5 y Guille Gardés, de 5. La familia Herrero (abuelos, hija y dos nietos) fue la más numerosa.

Ramón Reynés, con una BH de los años 30, fue el participante con la bicicleta más antigua. El grupo más numeroso fue Xino-Xano Bikers del Colegio La Salle de Maó con 38 miembros.

El disfraz más original fue para Felipe y Dina "el Frikipollo y la Frikigirl".