TW
0

PIME ha solicitado al Consell de Menorca la incorporación en la Ley de Turismo de Baleares de la posibilidad de que todas las viviendas de la Isla que dispongan de cédula de habitabilidad puedan alquilarse como turísticas.

La organización empresarial ha remitido al presidente de la administración insular, Santiago Tadeo, una carta a través de la que apuntan la necesidad de diversificar la oferta de alojamientos con la finalidad de reducir la comercialización turística del 'todo incluido' que, según aseguran, tiene consecuencias negativas sobre las empresas de servicios turísticos, como bares, restaurantes, comercios o alquiler de vehículos, entre otras.

El Comité Ejecutivo de la Federación, reunido el pasado día 4, acordó por unanimidad plantear al Consell de Menorca esta cuestión, ya que, tal y como remarcan en la misiva enviada al jefe del Ejecutivo insular, "el turista que se aloja en una vivienda es el que más utiliza los servicios de las empresas locales de servicios turísticos".

En este sentido, PIME hace hincapié en la necesidad "urgente e imprescindible" de adoptar medidas que permitan un reparto de la riqueza que aporta el turismo entre el mayor número de menorquines.

La organización avisa de que rechazar que las viviendas de Menorcapuedan alquilarse turísticamente "nos condenaría de nuevo a contar con una oferta existente que opera al margen de la legalidad y que se mantiene en un limbo jurídico al que nunca se le ha dado solución y que se ha demandado desde hace mucho tiempo".

PIME considera que esta alternativa posibilitaría que los propietarios de las viviendas pudieran generar recursos que, según indican, se invertirían posteriormente en el mantenimiento de los inmuebles y en la mejora de los servicios que se prestan.

"Sin duda esta opción alcanzará a muchos empresarios menorquines, no sólo del sector turístico, sino de servicios industriales y comerciales, que se beneficiarán de las pequeñas inversiones que se realicen en las viviendas y del gasto que el turista que las ocupa hará en el destino", han matizado.

Asimismo, recalcan que el factor desestacionalizador de las viviendas turísticas puede fomentar la llegada de turistas fuera de la tradicional temporada actual de tres meses. "El gasto de apertura de las viviendas no puede compararse con el que supone la apertura de otros establecimientos, que cada vez retrasan la fecha de inicio de sus actividades y adelantan el cierre", aseveran.