Centro. Bosch defendió ayer el mantenimiento de un colegio en pleno casco histórico de la ciudad - Paco Sturla

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El CP Sa Graduada iniciará el curso escolar con unos 320 alumnos y 13 grupos, cuatro más de los que debería disponer el centro. Pero todo apunta a que esta masificación histórica que padece el colegio y las elevadas ratios, que oscilan entre los 25 y los 27 estudiantes por aula, entran en su recta final.

El conseller de Educación del Govern, Rafael Bosch, confirmó ayer que el Ejecutivo autonómico incluirá en los presupuestos de 2013 una partida de 1,9 millones de euros para abordar la remodelación integral del centro.

Así es como para el curso 2012-2013 el alumnado no será trasladado y permanecerá, por lo tanto, en el CP Sa Graduada, periodo durante el que el IBISEC acabará de perfilar el proyecto para que, finalizado el curso puedan iniciarse las obras de reforma. El plazo de ejecución se plantea de doce meses.

Así las cosas, durante el curso 2013-2014 los alumnos matriculados en el CP Sa Graduada pasarán al nuevo centro educativo de Camí d'en Guixó con las previsiones de que el curso 2014-2015 el colegio vuelva a abrir las puertas completamente remozado.


Rafael Bosch se reunió ayer por la mañana con el Consejo Escolar del colegio para presentar el anteproyecto que, según avanzó el concejal de Educación del Ayuntamiento de Maó, Simón Gornés, "ha sido consensuado con el equipo directivo y los representantes de los padres de alumnos del centro".

El responsable autonómico de Educación defendió ayer el mantenimiento de un centro educativo completamente vivo en el casco histórico de la ciudad, un aspecto un tanto complicado hoy día cuando "todos los colegios que se construyen deben alzarse a las afueras de la ciudad", resaltó.

En este sentido señaló que un centro educativo diseñado en los años veinte nada tiene que ver con los proyectos constructivos actuales, no obstante, la adaptación a la normativa vigente es técnicamente viable.

El CP Sa Graduada volverá así a ser un centro de una línea con tres aulas de Educación Infantil, ubicadas en la planta baja, y otras seis de Primaria repartidas entre el primero y segundo piso. Entonces, el centro podrá acoger a unos 225 o 250 alumnos.

Tal como ya avanzó este diario, el anteproyecto contempla la redistribución de los espacios, la implantación de un ascensor, la construcción de otro núcleo de escaleras así como un nuevo acceso. A su vez, se eliminarán las barreras arquitectónicas, se dotará el centro con un gimnasio, zona de comedor y biblioteca.

En este sentido Bosch puntualizó que "los técnicos del IBISEC han tenido que adaptar las necesidades del centro a la superficie y estructura del edificio" y añadió que "lo hemos hecho encajar al milímetro".

En otra línea de cosas, el CP Maria Lluïsa Serra, ubicado en el Camí d'en Guixó, será recepcionado el próximo día 20 y abrirá sus puertas con unos 60 estudiantes desde P3 hasta primer curso de Educación Primaria.

El mantenimiento del CP Sa Graduada y la apertura del centro de Camí d'en Guixó permitirán solventar la falta de plazas y la actual masificación que sufre Maó.

La directora dice que no respirará aliviada hasta ver la cuantía aprobada

La directora del centro, Carmen Andreu, aseguraba ayer que el "compromiso que se plantea es muy firme" y si todo sigue su cauce "respiraremos aliviados".

Matiza que el equipo directivo es "escéptico" puesto que sus reivindicaciones son históricas y hasta el momento no había habido una solución concreta. Es por ello que indica que "hasta que no veamos el presupuesto aprobado no estaremos tranquilos".

Indica además que aunque este curso el centro vaya a contar con 13 aulas, para el año 2013-2014 serán probablemente doce por lo que "ya cabremos en el CP Maria Lluïsa Serra", indicaba.

Así las cosas, Andreu resalta que en la reunión celebrada ayer con el conseller de Educación, el Consejo Escolar incidió en que buscaran una solución a la propuesta de ubicación del gimnasio que, según la directora, "se sitúa en una parte del porche del patio donde se alzan dos columnas".

Además, solicitaron una segunda salida de emergencia por la parte trasera del centro que, según señaló la alcaldesa, Águeda Reynés, se está tramitando una expropiación para satisfacer esta petición.

Otra de las mejoras que propuso la comunidad educativa es que los dos salones de la zona de comedor estuvieran comunicados puesto que "su separación supone más monitores", explica la directora del centro. Esta petición parece que podrá ser solucionada con unas puertas de acceso entre los dos espacios.