Alaior también quiere regular la ocupación de la vía pública por terrazas y otro tipo de instalaciones. No obstante, a diferencia de otros municipios de la Isla que recientemente han modificado y actualizado su normativa, Alaior debe partir de cero. Esta localidad carece hoy día de una regulación al respecto, según explica el concejal de Urbanismo, Emilio Agis. Tradicionalmente, la ocupación del espacio público se ha dejado en manos de la "buena fe" del titular de este tipo de instalaciones. En este sentido, el regidor comenta que la inexistencia de una ordenanza específica dificulta hoy día la resolución de algunos expedientes disciplinarios abiertos.
Según el equipo de gobierno del PP de Alaior, el fenómeno de las terrazas ha experimentado en los últimos años un gran desarrollo en esta localidad. Los 'populares' entienden que estas instalaciones constituyen en la actualidad una alternativa de ocio más y una formula de negocio de muchos locales de restauración para atraer a los clientes. Por tanto, esta realidad hace necesario, a su juicio, plantear a sus titulares un marco normativo que garantice la seguridad e igualdad de los locales.
Así, la nueva ordenanza que el equipo de gobierno llevará hoy al pleno del Ayuntamiento define y especifica la tipología de las terrazas ocupadas con mesas y sillas, toldos, sombrillas y otros elementos necesarios propios de la instalación. Las autorizaciones tendrán carácter temporal correspondiendo su duración al año natural. Los permisos serán renovados automáticamente, por igual plazo, siempre que no hayan cambiado las circunstancias en que se concedieron. "Se trata de un punto muy favorable, ya que el titular no tiene que entregar año tras años la documentación requerida como venía realizando hasta el momento", explica Emilio Agis.
Limpieza e higiene
La ordenanza también hace hincapié en la responsabilidad del titular a la hora de mantener siempre en buen estado el dominio público, insistiendo en la limpieza, higiene y ornato de la zona. El regidor de Urbanismo del Ayuntamiento de Alaior enfatiza al respecto que la ordenanza adopta una postura rígida en el régimen sancionador, tipificando cualquier mal comportamiento del titular de la actividad.
La ordenanza especifica además los materiales y colores a utilizar. En este punto, Emilio Agis, recuerda que el equipo de gobierno ha creído conveniente incluir en la ordenanza una disposición transitoria para que cada titular pueda adecuar sus instalaciones a la ordenanza, dando un plazo máximo de dos años.
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