Los estacionamientos públicos de Maó lucían ayer por la mañana notablemente más desocupados de lo habitual. La entrada en vigor del sistema de Ordenación de Regulación de Aparcamiento (ORA) el pasado lunes parece haber disuadido a los conductores a pesar de que estacionar en estas zonas periféricas de la ciudad resulta más económico que hacerlo en las plazas de aparcamiento de la zona azul.
En concreto, los parkings de Es Freginal, Vives Llull o Camí de Ses Vinyes presentaban un aspecto algo funesto, mientras los que finalmente optaban por estacionar en ellos observaban despistados el parquímetro buscando quizá alguna explicación a la falta de vehículos aparcados. No obstante, lo cierto es que utilizar los aparcamientos públicos supone un coste de20 céntimos/hora para los no residentes en el municipio y10 céntimos/hora para aquellos que dispongan de algunos de los dos abonos que pueden obtener los vecinos.
Esta tarifa es notablemente inferior a la que se aplica en la zona azul, donde los que no cuentan con la tarjeta roja o azul deben abonar un mínimo de 50 céntimos por 20 minutos y un máximo de 3 euros por 2 horas. Por su parte, los residentes con tarjeta azul o roja se benefician de una bonificación del 40 y el 60 por ciento respectivamente.
Sin embargo, el Ayuntamiento matiza que los precios bajarán de cara al próximo mes de octubre, una vez se comience a aplicar de nuevo el horario de invierno. Será entonces cuando la tarifa general descenderá hasta los 30 céntimos por 20 minutos y los 1,60 euros por 2 horas de estacionamiento.
ABONOS
Por el momento, el Ayuntamiento ha expedido alrededor de 350 tarjetas a los residentes en Maó desde que el pasado día 26 de julio se iniciara la campaña. Concretamente, la oficina habilitada en la calle Sant Roc tramita entre 50 y 60 abonos diarios, según señalaron ayer fuentes del Consistorio. Asimismo, se espera que esta cifra pueda aumentar considerablemente tras el comienzo de la aplicación de las nuevas tarifas.
concesión
La empresa Dornier, concesionaria del sistema AREA o de pago, cuenta a día de hoy 666 plazas de aparcamiento, tal y como estipula el contrato firmado en octubre de 2010 con el Ayuntamiento. A pesar de ello, esta cifra no contempla los 480 estacionamientos de pago habilitados en los aparcamientos públicos del municipio, que también gestiona Dornier.
Fuentes del equipo de gobierno recalcan que, a pesar de que los ciudadanos puedan tener la impresión de que se han incrementado el número de aparcamientos de zona azul, esta adaptación era necesaria debido a que los cambios urbanos registrados en los últimos meses como consecuencia de la peatonalización de nuevos tramos habían dado lugar a un descenso del número de plazas de pago que, según el convenio, debe administrar la empresa concesionaria.
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Menorca - Es diari
De momento no hay comentarios.