"Desde pequeño mi ilusión era que mi abuelo me viera trabajar para la empresa"

Y tal y como se encargó de recordar su actual director general, Frederic Mudoy, la firma está relacionada de una forma muy directa con la Isla. Y es que Rotger es una empresa familiar, en cuarta generación, que inició sus actividades en el mundo de las publicaciones en 1927, cuando Vicente Rotger Rosselló (bisabuelo de Frederic), quien había estado ligado al sector de la bisutería en su Alaior natal, se instaló en Palma e inició la gestión de un kiosco de prensa situado en el Paseo del Borne.

Así se sentaron las bases de una firma que siguió adelante introduciéndose en el mundo de la distribución de publicaciones para acabar en un buen número de diferentes áreas de negocio (logística, mensajería, distribución, libros...) Confiesa Frederic que "desde muy pequeño mi ilusión era que mi abuelo me viera trabajar en la empresa familiar".

Su deseo se ha cumplido, y ahora es uno de los pilares de una firma que atesora una de las virtudes más características de las empresas familiares : "tomamos decisiones a largo plazo y sacrificamos el beneficio".

Además reinvierten todo lo que generan, pero una de las claves de más peso, según Mudoy, podría ser que no recurren a la deuda externa: "nos autofinanciamos".

Pero más allá de lo económico, para Mudoy empresas como para la que trabaja ofrecen otro tipo de rentabilidades. "También son una vía de realización personal y un vehículo de unión familiar".