Construcción. La economía está ralentizada y no ayuda a impulsar nuevas obras - Archivo

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El Ayuntamiento de Es Mercadal podría cerrar el año con un saldo negativo en lo que respecta al Impuesto sobre Construcciones, Instalaciones y Obras (ICIO). Aunque en los presupuestos municipales se calculó una previsión de ingresos de 161.000 euros en concepto de este impuesto, el alcalde teme que el saldo no solo no llegue a la cuantía fijada sino que además, sea negativo. Y es que los servicios económicos del Consistorio han detectado un gran número de solicitudes de retorno de este impuesto al renunciar quien lo pagó a la ejecución de la obra.

Se trata de un derecho que tiene el ciudadano de solicitar la devolución de la cuantía abonada a las arcas municipales en concepto del ICIO. No obstante, esta opción que tienen los ciudadanos puede suponer un revés importante en aquellos ayuntamientos que cumplen el presupuesto a rajatabla y sin casi posibilidad de desvíos. No es el caso de Es Mercadal ya que, además de elaborar unas cuentas "prudentes", en palabras del alcalde, Francesc Ametller, este desfase quedará equiparado con otras tasas así como con el aumento aplicado desde el Gobierno central sobre el impuesto de Bienes Inmuebles, y a través del que el Ayuntamiento calcula unos ingresos de unos 180.000 euros más de lo presupuestado.

Con ello y a pesar de esta situación con la que tienen que lidiar, Ametller asegura que "la economía presupuestaria se cumple en Es Mercadal". En este sentido, el alcalde opina que este hecho es un ejemplo claro de que la economía está "ralentizada" y que "las medidas que se están aplicando no generan confianza". Además, explica que la bajada "notable" en solicitudes de licencia de obras se va suavizar y, por lo tanto, compensar, con las plusvalías. A falta aun de tres meses para cerrar el año, Es Mercadal ya ha ingresado un 60 por ciento más de lo presupuestado por este concepto. En este sentido, Ametller señala que si el presupuesto marcaba 213.000 euros "llevamos ingresados 340.000 euros". Estas diferencias entre la bajada en licencias de obras pero el aumento importante de las plusvalías lleva a Ametller a hablar de "posible especulación".

Impuesto Bienes Inmuebles
El alcalde afirma que está "satisfecho" de que los ciudadanos cumplan con sus obligaciones fiscales. En este sentido, indica que el cobro de impuestos y tasas van en la misma línea que el ejercicio anterior. Si los presupuestos municipales preveían unos ingresos de 3,8 millones en concepto del Impuesto de Bienes Inmuebles, a día de hoy el Ayuntamiento ha recaudado algo más del 94 por ciento de esta cuantía, es decir, unos 3,6 millones de euros. Algunos vecinos, tal y como comenta Ametller, han solicitado un aplazamiento del pago. Esta opción "ofrece ventajas a los ciudadanos puesto que el interés oficial está en aproximadamente un cinco por ciento pero, en caso de tener que pagar la cuantía de un solo golpe, estos ciudadanos deberían hacer un préstamo al banco con unos intereses superiores al oficial", señala. No obstante, esta situación supone que las arcas municipales no ingresen la totalidad de lo presupuesto con la necesidad de acudir al banco para hacer frente a la gestión e infraestructura municipal "y tener que pagar un interés también superior", lamenta e indica que "siempre llueve sobre mojado".

Ametller señala que el ciudadano no entiende por qué si hay un alto cumplimiento de sus obligaciones fiscales, el Ayuntamiento no ofrece todos los servicio que debería, "la respuesta que les doy es que quien debe pagar al Ayuntamiento, el Govern, no lo hace".

Además, el alcalde incide en que además de no pagar "incumple la ley". Se refiere al Fondo de Cooperación Municipal de 2011. Explica que la ley 20/2006 de 15 de diciembre, municipal y de régimen local de Balears, contempla que ningún municipio recibirá una aportación anual del Fondo inferior a la recibida el año anterior. Ametller denuncia que el municipio recibió en 2011 84.939 euros, que equivalen al 75 por ciento de la cuantía de 2010 (113.253 euros) y por tanto, se incumple la ley.

Por otra parte, el alcalde lamenta que esta "inoperancia" de la administración autonómica e insular se traduzca en la necesidad de concertar préstamos a corto plazo. "Debemos pagar en concepto de intereses 40.000 euros con los que podríamos ofertar hasta cinco cursos becados", concluye, a modo de ejemplo.