La Gerencia Territorial del Ministerio de Justicia en Balears informó ayer que el próximo lunes, día 22, se iniciará el traslado de los órganos judiciales actualmente dispersos por Maó a la nueva sede judicial de Fort de l'Eau. La mudanza se prolongará hasta el miércoles día 31, algo más de una semana.
La Fiscalía; el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 3; el Juzgado de lo Penal (ubicado ahora en el Polígono industrial); la forensía y la oficina de atención a las víctimas ultiman estos días las cajas para el inminente traslado. El objetivo es que a principios de noviembre todas las dependencias judiciales de Maó estén definitivamente instaladas en Fort de l'Eau.
Hay que recordar que en el "viejo" edificio judicial cercano a la nueva sede se encuentran ubicados los juzgados de Primera Instancia e Instrucción número 1 y 2, el decanato, el registro civil y varias salas de vistas. Con el traslado previsto para los próximos días finalizarán los continuos movimientos por Maó de profesionales y usuarios de la Administración de Justicia.
El cambio afectará a una treintena de trabajadores aproximadamente según explicó el gerente territorial del Ministerio de Justicia, Antonio Gómez, quien quitó importancia al retraso de más de un año que acumulará la inauguración de la nueva sede judicial sobre la fecha inicialmente prevista por el Ministerio, a mediados de 2011.
"Hubo algún problema de ejecución de obras, pero el edificio se entregó en un plazo razonable. También hemos demorado el traslado porque había pequeños detalles que corregir relacionados con los canales de comunicación como las videoconferencias de las salas de vista y cuestiones del sistema informático como son los servidores del Ministerio de Justicia", indicó Antonio Gómez.
El gerente resaltó que el partido judicial de Maó "queda muy bien dotado" con el nuevo juzgado, incluso en situación destacada en comparación con el resto de sedes judiciales de Balears.
Sin nueva Oficina Judicial
No obstante, y a pesar de que la estructura y el diseño del edificio está adaptado para acoger la nueva Oficina Judicial, ésta aún no ha sido implantada en Balears y, por tanto, los nuevos juzgados de Maó se estrenarán sin uno de sus buques insignia. El objetivo era que en la nueva sede judicial se instalaran solo los jueces y unos cuantos funcionarios, y que los servicios comunes (notificaciones, embargos...) se mantuvieran en el viejo edificio de enfrente.
La Oficina Judicial se presentó como un nuevo modelo organizativo que rompería con la concepción clásica de juzgado para impulsar un nuevo sistema de gestión, apoyado en las nuevas tecnologías, la agilidad, la transparencia, la eficacia y la eficiencia en la racionalización del trabajo y la optimización de los recursos. Su finalidad, en definitiva, era descongestionar y modernizar la Administración de Justicia, mejorando la calidad del servicio público que presta a la ciudadanía, pero su implantación está encontrando problemas.
Así, Balears en general y Maó en concreto, deberán esperar. Desde la Gerencia Territorial del Ministerio de Justicia se insiste, sin embargo, en que el edificio está preparado y en condiciones para asumir la puesta en marcha de la Oficina Judicial, de hecho, ya se ha diseñado el futuro túnel que unirá las dos sedes judiciales.
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