Centro sanitario. Claudio Triay considera que la plantilla de médicos está "muy ajustada" - Archivo

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Se sabe que el recorte presupuestario del capítulo de personal del Área de Salud de Menorca de cara a 2013 será de 1,6 millones, pasando de los 45.180.553 euros del presente ejercicio a los 43,523,340 euros previstos para 2013, aunque todavía se desconoce de qué modo va a afectar este descenso de la partida a los centros de salud de la Isla y al Hospital Mateu Orfila. Sin embargo, las previsiones no son nada halagüeñas.

Por un lado, el responsable de sanidad de CCOO, Juan Andrés Bernabeu, alerta que la contratación de personal eventual quedará especialmente restringida, lo que supondrá, entre otras consecuencias, un descenso de la plantilla de médicos contratados en régimen de acumulación de tareas o de aquellos especialistas que realizan sustituciones por incapacidad transitoria.

Por otra parte, el delegado del Sindicato Médico de Balears (SIMEBAL) en Menorca, Claudio Triay, considera que el descenso de los recursos destinados al capítulo de personal sanitario es "inasumible". "Después de los recortes en el departamento de enfermería, la plantilla no se puede reducir más", precisa Triay, quien teme que esta rebaja de la partida pueda ir en detrimento de la calidad asistencial.

En esta misma línea, el delegado sindical subraya que también la plantilla de médicos está "muy ajustada" e incluso hay plazas que no están cubiertas. Es el caso del puesto dejado por el especialista en ginecología y reumatología, Pau Lluch, quien tras su jubilación no ha sido sustituido. Del mismo modo, los servicios de Cardiología y Neumología tan sólo cuentan con un especialista, a pesar de que ambos disponen de dos plazas.

"El problema es que elaboran unos presupuestos que después son imposibles de cumplir porque no se ajustan al gasto real", señala el delegado de SIMEBAL, quien asegura que la máxima incógnita a día de hoy tiene relación con el modo en que los recortes del presupuesto afectarán a la plantilla. "Es la pregunta que nos hacemos todos, pero es imprevisible", añade, antes de remarcar que las consecuencias pueden ser "muy graves", especialmente tendiendo en cuenta las dificultades para fomentar el traslado de profesionales médicos a la Isla con el fin de cubrir plazas de determinadas especialidades.

MEDIDAS DE AHORRO

En este punto, Triay defiende el diálogo con el Govern con el fin de llegar a acuerdos similares a los alcanzados en Castilla- León o Castilla-La Mancha, donde el gobierno se ha comprometido a no llevar a cabo despidos mientras el personal proponga medidas de reducción del gasto. "Los profesionales somos los que mejor conocemos en qué ámbitos se puede ahorrar y en cuáles no", remarca. Por ello, propone que los jefes de servicio cuenten con una mayor capacidad de decisión en relación a las medidas de ahorro.

Precisamente este es una de los principales objetivos del Sindicato Médico de Balears, tal y como precisa el vicepresidente de Hospitales del colectivo, Miguel Lázaro, quien ayer participó en un encuentro mantenido con el conseller de Salud, Familia y Bienestar Social, Martí Sansaloni. "Han comenzado las negociaciones relacionadas con la plantilla del hospital Son Espases, que probablemente se extrapolarán al resto de centros sanitarios", explicó a este periódico tras la reunión.

Lázaro precisó que la postura de SIMEBAL es que los médicos eventuales con vacante se conviertan en interinos mientras que los especialistas eventuales sin vacantes, contratados en régimen de acumulación de tareas, puedan mantener su puesto de trabajo mientras la dirección médica y los jefes de servicios alcancen acuerdos para que éstos últimos se comprometan a ahorrar a través de una racionalización del gasto farmacéutico y tecnológico.

En relación al Área de Salud de Menorca, el vicepresidente de Hospitales del sindicato subrayó las dificultados para fidelizar y estabilizar la plantilla de médicos debido a la elevada rotación. Por ello, destacó la importancia de aplicar una política de recursos humanos que contemple las necesidades de los centros sanitaria de la Isla. "En Menorca no sobran médicos", concluyó.