Hernández. Delegado de la Conselleria de Educació en Menorca - Archivo

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El delegado de la Conselleria de Educación del Govern balear en Menorca, Julián Hernández, se reunió ayer con los directores de los institutos de secundaria de Menorca debido al creciente descontento de este colectivo con la política educativa del Ejecutivo autonómico.

Durante este encuentro, los directores transmitieron a Hernández su desacuerdo ante los recortes económicos, la falta de inversión en los centros y temas como la política lingüística.

Al finalizar el encuentro, Hernández admitió que "todo lo que se ha hecho a nivel de política lingüística a nivel balear no era necesario en Menorca, porque aquí el tema de la lengua estaba superado".

Con esta crítica a las líneas marcadas por su propio Ejecutivo, el delegado menorquín explica que "hay profesores que llevan trabajando en este campo desde hace 27 años, han sembrado mucho y ahora ven como todo el trabajo realizado no se podrá mantener. Entiendo su nerviosismo y su malestar, pero la norma se hace para todos, y hay que acatarla. Pagan justos por pecadores".

Hernández comparte que "en Menorca los alumnos salen perfectamente preparados en las dos lenguas (catalán y castellano) porque los docentes han hecho una gran labor".

Tras el encuentro con los directores, el delegado de la Conselleria de Educació declara que "entiendo perfectamente el nerviosismo del profesorado, pues deben trabajar en un panorama de austeridad y están realizando un gran esfuerzo porque ha aumentado el número de alumnos por aula, sobre todo en Secundaria, hacen más horas que antes y además les han quitado una paga. Es muy normal que la gente esté intranquila".

En esta línea, Hernández añade que "yo intento luchar en beneficio de todos los centros, pero las circunstancias son las que son. Solamente puedo dar las gracias al profesorado por aguantar esta situación".

Recientemente, Educació ha abonado a los institutos la partida correspondiente a los meses de junio y julio, con lo que el retraso en el pago es de cuatro meses. "Los proveedores están nerviosos, y evidentemente no acuden a la Tesorería del Govern balear, sino a los directores, que se encuentran en una complicada situación entre el alumnado, el profesorado, los padres y la Administración", defiende Hernández.

Interpelado sobre si además de este reconocimiento a la labor de los docentes y directores y compartir su preocupación Hernández podría hacer algo más, el delegado responde que "¿qué puedo hacer si no hay recursos? Si abres la nevera y no hay prácticamente nada, no puedes hacer una paella., Hacemos lo que podemos", responde.

Por su parte, los directores de los institutos, asociados en ADESME, declinaron ayer realizar una valoración del encuentro con Julián Hernández, aplazando sus impresiones hasta el día de hoy. No obstante, sí agradecieron al delegado la celeridad en atender su petición de reunión y el ambiente cordial de la misma, más después de que esta reunión surgiera, en parte, por algunas declaraciones del propio Hernández que los directores consideraron desafortunadas.