El proyecto presentado por Marina Deportiva de Menorca S.L. para la ocupación de dominio público y la consecuente gestión de los puntos de amarre de la ribera norte del puerto de Maó prevé a lo largo de año y medio una inversión próxima a los dos millones de euros dirigida, fundamentalmente, a la creación y ampliación de pantalanes y embarcaderos, a la reparación de instalaciones ya existentes y a la demolición de muelles y espigones irrecuperables. También incluye una partida de poco más de 211.000 euros para la reforma y mejora del edificio Venecia.
Todo ello con una ocupación de lámina de agua de 33.242 metros cuadrados, muy por debajo de los 256.000 metros cuadrados que se adjudicó la anterior concesionaria, OCIBAR, y que al final, entre otros factores como las elevadas inversiones a que se comprometió, acabaron por forzar la inviabilidad del proyecto y su renuncia a la gestión. Ahora, Marina Deportiva de Menorca opta con esta oferta a la concesión administrativa por parte de Autoritat Portuària de Balears de esta franja costera.
Con una inversión considerablemente inferior a los seis millones de euros comprometidos por OCIBAR y con un canon más ajustado por reducción de la ocupación de dominio público portuario, todo apunta a que, de resultar concesionaria la empresa menorquina, los precios por el alquiler de amarres serán, previsiblemente, más atractivos que antes, tanto para residentes como para visitantes.
El detalle
Según recoge el proyecto básico, en exposición pública desde comienzos de año, la empresa compromete una inversión de 314.761 euros en la creación y ampliación de pantalanes, ubicados en su mayoría en la franja que discurre entre Banyers de Pedra, Cala Rata y Cala Ratolí, donde se proyectan 57 puntos para embarcaciones de siete y cinco metros de eslora, y también en Cala Llonga, zona en la que centró su actuación inversora la anterior adjudicataria y donde Marina Deportiva de Menorca plantea otros 48 atraques para barcas de diez, siete y cinco metros. En el espacio comprendido entre Sant Antoni, Cala Apartió y Venecia solo se prevén trece nuevos puntos.
En cualquier caso no se trata de plazas adicionales a las planteadas por OCIBAR; en realidad, son puntos sobre los que se actuará por primera vez. De hecho, de acuerdo con el redactado del proyecto básico, la sociedad Marina Deportiva de Menorca estima un máximo de 379 puestos de amarre para todo este espacio portuario, cuando la cifra anterior ascendía a 442.
En esta misma línea hay que tener en cuenta que, en caso de conseguir la concesión administrativa, Marina Deportiva de Menorca procederá a demoler pantalanes y espigones en pésimo estado de conservación que no necesariamente suplirá en el mismo número y tamaño.
Las actuaciones de demolición, que cuentan en total con un presupuesto de 63.365 euros, se ejecutarán en su mayor parte en Cala Ratolí y aledaños. También serán destacables en el área que discurre entre Sant Antoni y el edificio Venecia.
Por otra parte, el nuevo proyecto también incluye una partida económica de algo más de 171.000 euros para la reparación, mantenimiento y acondicionamiento de muelles y pantalanes ya existentes.
Los accesos también serán objeto de mejora. Según lo establecido en el proyecto básico, la nueva concesionaria actuará sobre la casi totalidad de la veintena de viales de acceso a las instalaciones. A los trabajos de desbroce y limpieza sucederán, en algunos casos, las obras de mejora de las soleras, la construcción de peldaños y el aplacado de piedra en escaleras, así como la ejecución de muretes de hormigón y barandillas de madera y la iluminación de diversos tramos.
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