Protesta. Una de las marchas populares contra la reforma proyectada en la carretera general - Archivo

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El PSOE denuncia, en sus alegaciones al proyecto de ampliación de la Me-1, que la "denominada mejora" de la carretera general entre Ciutadella y Ferreries "modificará sustancialmente la fisonomía" de dicho tramo, cuya longitud es de 12,760 kilómetros. Los socialistas señalan que dicha parte de la vía necesita actuaciones puntuales, pero "en ningún caso un proyecto como el sometido a exposición pública, a todas luces sobredimensionado", y reclama la supresión o reducción de la mayoría de rotondas.

Desde la oposición en el Consell se recuerda al equipo de gobierno que las rotondas a doble nivel que se han previsto en el proyecto no recogen las soluciones del Plan Director de Carreteras aprobado inicialmente y que se incluyeron en el pliego de condiciones de la licitación del proyecto. En concreto las alegaciones del PSOE reclaman que se elabore un estudio de alternativas de las diferentes intersecciones y enlaces viarios propuestos en el trazado entre Ciutadella y Ferreries, con la remodelación de las siguientes intersecciones: la del acceso al camino de s'Almudaina; la de acceso a los caminos de Torrellafuda y Son Planes; la remodelación del acceso a la Naveta des Tudons; y la de la intersección de acceso al camino des Caragolí. Otra de las alegaciones socialistas se refiere a la necesidad de aprobar el Plan Director de Carreteras antes de que se lleve a cabo la ocupación efectiva de las fincas afectadas por las obras. También plantea el PSOE que, a partir del ahorro que pueda suponer la adecuación del proyecto "a las necesidades reales, sin excesos ni desmesuras", se pueda renegociar el convenio de carreteras con Fomento, para reprogramar actuaciones y que el excedente económico resultante pueda invertirse en otras mejoras necesarias en la Me-1.