Extracomunitarios. Algunos ciudadanos, como estos bolivianos, se enteraron por la prensa de la medida - Gemma Andreu

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Imagínense la escena. Una pareja procedente de un país extracomunitario que reside en la Isla acude a una agencia de viajes para comprar un billete. La mujer, al haber adquirido la nacionalidad puede beneficiarse del descuento de residente y paga por su billete algo menos de 60 euros. Por su parte, el varón, quien cuenta con la tarjeta de residencia de larga duración, expide el billete y paga 120 euros. No es beneficiario de la bonificación por descuento al no tener la nacionalidad.

Este supuesto ha dejado de producirse después de que el lunes (al ser festivo en Balears comenzó a aplicarse ayer) entrara en vigor la ampliación de las subvenciones en los billetes de transporte aéreo y marítimo a los ciudadanos nacionales de terceros países que sean familiares de residentes que ya tuvieran derecho a subvención y a ciudadanos nacionales de terceros países que sean residentes de larga duración.

Hasta el momento, los extracomunitarios que podían beneficiarse del descuento de residente eran los que habían obtenido la nacionalidad, quedando excluidos todos los otros supuestos. Es a partir de este mes que Fomento ha ampliado la bonificación por residente incluyendo entre los beneficiarios a los familiares de comunitarios así como a los extracomunitarios que han obtenido la tarjeta de larga duración.

Este hecho ha sido recibido con gran satisfacción entre la población inmigrante de la Isla. El presidente de la Asociación Peruanos, Rafael Heros, mostraba ayer su alegría por la noticia que, según asegura, "va en la línea de que prevalezca la igualdad de derechos entre todos los residentes". Para Heros, "era discriminatorio que pagásemos los mismos impuestos que cualquier otro español pero no pudiéramos disfrutar de los mismos derechos". Para este peruano, era una de las reivindicaciones históricas que ahora empieza a verse realizada.

Por su parte, para el presidente de la Asociación Argentinos de Menorca, Jesús Manuel Lucero, "esta medida es un gran alivio" en un contexto económico muy complicado. Este argentino lleva ocho años residiendo en la Isla y tres con la tarjeta de residencia de larga duración. Lucero padecía la misma situación que se ejemplifica en el encabezado de este artículo. Y es que, según asegura, hasta el momento, su pareja, al haber conseguido la nacionalidad, podía beneficiarse del descuento de residente. Pero en su caso, al contar con una tarjeta de larga duración, no disfrutaba de la bonificación. Lucero señala que esta medida va a ser muy beneficiosa para aquellos extracomunitarios que necesiten tramitar algún documento en el consulado y deban viajar. Este argentino constata que "la medida favorecerá a muchos extranjeros".

Por su parte, el marroquí Rachid Zoundri, desconocía el alcance de la noticia, no obstante, no dudó en afirmar que "para nosotros es un alivio en tiempos de crisis y una noticia muy agradable" puesto que "hemos sufrido tarifas realmente agresivas". Coincidía con Lucero en apuntar los beneficios que aportará la medida entre aquellos extranjeros que deban desplazarse a Palma para efectuar algún trámite en el consulado que, aunque se desplace a Menorca cada tres meses, "aquellos que necesitan algún documento de forma más ágil, a veces no pueden viajar por no poder pagar el billete". A pesar de la satisfacción, Zoundri aspira a que algún día la medida se extienda a todos los residentes.
británicos

Por otra parte, la cónsul honoraria británica, Débora Hellyer, asevera que algunos británicos también podrán beneficiarse de la medida. Los británicos gozan del descuento de residente. No obstante, a partir de este momento, se suman a la bonificación las parejas no europeas de británicos. También favorecerá a los hijos adoptados procedentes de una país extracomunitario. "Hasta el momento no podían aplicar al hijo dicho descuento", señala Hellyer. Además, la cónsul honoraria quiere dejar claro que aquellos británicos empadronados en la Isla pero que no son residentes al no ser su vivienda habitual, "no tienen derecho a la bonificación".