TW
0

La situación de Llorenç Casasnovas pende del último recurso presentado por su abogado para evitar su ingreso en prisión, dictado por la Audiencia Provincial. Mientras tanto, fuentes próximas al exconcejal de Urbanismo rechazan la imagen de "estafador de jubilados" y quieren explicar la versión que conocen de los hechos.

La zona del solar de las ratas fue calificada como terreno urbano de interés deportivo municipal en el mandato de Joan Sintes, sin compensación a los afectados. En ese momento, Sebastián Marqués tenía el solar de las ratas y a su lado, su hermano José disponía de una vivienda construida.

Según la versión del círculo cercano a Casasnovas, mientras José Marqués consiguió que el Ayuntamiento le permutara su casa por otra vivienda tras denunciar las molestias y ruidos del colegio vecino, Sebastián Marqués acudió a diferentes alcaldes, infructuosamente, para que el Ayuntamiento le comprara el solar.

En el mandato de PP-PMQ, el jubilado acudió al nuevo equipo de gobierno para tener un trato igual al que había tenido su hermano. Según estas mismas fuentes, el entonces alcalde Llorenç Brondo derivó el tema al entonces concejal de Urbanismo, Llorenç Casasnovas, quien le comunicó que al Ayuntamiento no le interesaba adquirir el terreno.

Siempre según esta versión, el jubilado pidió al entonces edil que le buscara un comprador. En esa época, Llorenç Casasnovas anunció por la prensa que a los propietarios afectados por zonas verdes o deportivas se les compensaría cada 3.000 metros cuadrados de este tipo de calificación por 1.000 metros cuadrados de terreno en la ampliación de POICI, pagando la correspondiente cuota de infraestructura.

Según estas fuentes, fue cuando el empresario mallorquín Antoni Picó se interesó por adquirir terrenos de zona verde en Ciutadella. Llorenç Casasnovas le informó del interés del jubilado por vender su parcela, y comprador y vendedor se pusieron de acuerdo. Antoni Picó estaba dispuesto a pagar 24.000 euros por los 109 metros cuadrados de zona deportiva de Sebastián Marqués.

Siguiendo con el relato de la versión próxima al exedil, el empresario vino de Cala Ratjada en barco para firmar la compra. Ese día no se pudo realizar la operación en la notaría que había en la Plaça des Born y Llorenç Casasnovas se ofreció a acompañarles hasta la notaría de Es Mercadal.

Al cabo de dos semanas de la compra-venta, la entonces concejala de Servicios Sociales, Antònia Gener, pidió a Llorenç Casasnovas que le enseñara al presidente de Cruz Roja la casa contigua al solar de las ratas, que había sido de José Marqués y que ya era del Ayuntamiento, como posible sede para la entidad.

Según esta versión, ambos visitaron el inmueble, que gustó al directivo de la Cruz Roja pero echó en falta una zona de aparcamiento para los vehículos de la entidad. Fue cuando el entonces edil propuso que el Ayuntamiento comprara el solar de las ratas como aparcamiento contiguo. Entonces el edil propuso que este solar fuera adquirido por el Ayuntamiento mediante la permuta por un solar de 106 metros cuadrados edificables en la calle Glosador Vivó.

Días antes del pleno que debía aprobar esta permuta, el entonces presidente de Cruz Roja comunicó al Ayuntamiento que la casa al lado del solar de las ratas no les interesaba porque habían conseguido otro local mejor. Así las cosas, el edil de Urbanismo, siempre según esta versión, pidió al equipo de gobierno que retirara del pleno la propuesta de permuta, que no se aprobó.

Según estas fuentes, el jubilado Sebastián Marqués fue presionado para personarse como acusación particular, a la vez que el letrado que se ofreció a defenderle había sido un cargo de confianza del equipo de gobierno del Pacto que fue destituido cuando entró a gobernar el PP-PMQ.