El inicio de los trabajos de descontaminación de los terrenos de Cala Figuera, que hasta hace poco han acogido las instalaciones de almacenamiento de CLH, ha movilizado a Jesús González, un amante de la arqueología que alerta de la necesidad de proteger un ninfeo de época romana existente en la zona y, después, facilitar el acceso público al mismo.
Jesús González ha expresado su preocupación por el futuro del monumento consagrado a las ninfas, divinidades del agua, que se levanta en Cala Figuera, precisamente en el entorno donde durante un año se desarrollarán los trabajos de saneamiento de los terrenos contaminados por la presencia de hidrocarburos. González alude a la publicación "El ninfeo de Cala Figuera", redactado por el arqueólogo Ferran Lagarda, en el que se constata que dicho monumento es un ninfeo de época romana, después de haber comparado dicha construcción con otros ejemplares en España y el resto de Europa. Según González, el arqueólogo denuncia el estado de abandono en el que se encuentra el monumento desde que fue excavado y, además, constata que Consell insular, CLH y Autoridad Portuaria no se refieren a dicho yacimiento cuando en los medios de comunicación se ha tratado sobre el futuro de estos terrenos, una vez eliminado el centro de almacenamiento.
Ferran Lagarda afirma en su libro que se trata de una portada monumental, de 2,90 metros de altura y una anchura máxima de 2,30 metros, con dos jambas esculpidas sobre las que descansa un dintel curvo, encima del cual se apoya un frontón semicircular.
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