Tòful Marqués. Presidente de la Asociación de Criadores - Javier

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Tòful Marqués, (Ciutadella, 1953), presidente de la Associació de Criadors i Propietaris de Cavalls de Raça Menorquina desde el pasado mes de diciembre, atiende al Menorca mientras ultima los preparativos de la XVII Fira del Cavall y del XXIII Concurso Morfológico que se celebran entre hoy y mañana en el Recinto Ferial de Es Mercadal.

¿Nervioso? Es el primer compromiso fuerte que afronta como presidente.
No exactamente, porque conozco el mundo del caballo. Hay que tener en cuenta que fui presidente del Consejo Jueces y había estado como vocal en las dos primeras juntas de los fundadores de la Asociación hace 25 años. Pero estoy preocupado porque uno siempre quiere que las cosas salgan bien. Existe una responsabilidad.

¿Un mayo en Menorca sin Fira del Cavall es un mayo sin flores?
Si, y cada vez viene más gente a vernos.

¿Y también cada vez tienen más participantes?
Este año participarán 108 ejemplares de raza menorquina en el XXIII Concurso Morfológico, lo que representa casi un 20 por ciento más que el año pasado. El problema que tenemos es la crisis.

De hecho la novedad de este año es la organización de una sección de venta.
Sí, queremos revitalizar la venta de animales que se hayan apuntado tanto al concurso morfológico como de funcionalidad. Esperemos que esta nueva propuesta nos salga bien. (Ver página..)

¿En qué reside el encanto de del caballo menorquín?
Empecé a montar en las fiestas de Menorca cuando tenía 13 años y siempre he estado criando caballos. Cualquiera que se dedique a criar animales de raza menorquina, si no tiene un caballo es como lo que ha dicho antes, un mes de mayo sin flores. Dicen que el menorquín es un caballo con genio y temperamento, pero muy fuerte y con gran resistencia. Como le he dicho fui juez de la primera promoción de caballos de raza menorquina en 1985 y el coronel que nos impartió el curso, nos dijo entonces que el caballo menorquín era un caballo de estampa y primera vista y nada más, sin embargo, poco a poco hemos demostrado que tiene fondo y que hace lo que se le pide.

¿Qué virtud debe tener un buen criador de caballos de raza menorquina?
Es fundamental tener un pequeño espacio de terreno y mucha afición. El caballo Menorca sirve para las fiestas, para paseo, para doma, para enganche y salto. En cambio, las otras razas, sin discriminar a nadie, no son tan polivalentes. Tal vez en doma no es un caballo que se destaque, pero si se sabe llevar, funciona. Hay criadores que han llevado esta raza al Campeonato de España. Además hay que tener en cuenta que la capa negra es muy difícil de mantenerla, algunos comentan que en Menorca había también caballos de otras capas, pero creo que lo que estamos haciendo está bien.

Ustedes cuentan con un plan de mejora de la raza avalado por la Universidad.
Sí, y creo que se está llevando bastante bien e intentaremos potenciarlo.

¿Cuántos criadores de caballos de raza Menorquina tienen censados?
Si hablamos de quienes han criado en estos tres últimos años, contabilizamos 171 criadores, aunque sólo se han criado 70 ejemplares. Tenemos criadores en Holanda, Alemania, Suiza, la Península, en Italia y Francia. Además, tenemos socios de la asociación en estos sitios. En total ya sumamos 470 socios.

¿Qué objetivos se ha marcado al frente de la asociación que preside?
Lo ciento es que entré en la presidencia de rebote, porque con la crisis nadie se veía capaz de coger las riendas y, junto a varios compañeros que habíamos estado en la primera junta directiva hace 25 años, decidí dar el paso. Pero lo hicimos siempre pensando en la ayuda de todos. El caballo menorquín no es de ningún pueblo de la Isla en concreto sino de toda Menorca. Por eso, en la junta hay vocales de toda Menorca. Somos 14 miembros en la directiva y en la última asamblea expliqué que en la asociación no sólo la junta toma decisiones, sino que deben ser tomadas entre todos los socios. De hecho, la creación de una sección para la venta de caballos en la Feria de este año salió de una propuesta de un socio y si salen más propuestas, y todos están de acuerdo, también las llevaremos a la práctica. La raza no es nuestra sino de los socios y de todos los menorquines. Por eso, a parte de la Feria de mayo, me gustaría hacer otros encuentros, otros espectáculos o concursos de doma menorquina y doma clásica.

¿Cuál es el principal déficit de la entidad?
Cuando estás fueras piensas en las cosas que se pueden hacer pero cuando entras te das cuentas de las dificultades, especialmente de las económicas. La ayuda del Ministerio de Agricultura nos ha bajado casi un 50 por ciento. Las ayudas del Consell, del Govern y de los ayuntamiento también hoy por hoy son insuficientes. Los socios también pagan unas cuotas simbólicas de 35 euros cada año, pero que ni siquiera son suficientes para solucionar todo el papeleo.

¿Cuál es el nivel del caballo menorquín?
Creo que es bastante bueno. Este año estamos intentando ir al campeonato de España. El año pasado no se hicieron las pruebas donde pretendíamos ir porque no hubo suficiente participantes. Se trata de un concurso en el que puede participar cualquier raza, incluso menorquines, pero suelen ir pocos, porque el nivel es alto y aquí no estamos muy convencidos de nuestro nivel.