Presentación. María Membrive, Vicenç Tur y Elena Costa, ayer - Gemma Andreu

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El 70 por ciento de los comercios radicados en el puerto de Maó considera que el cierre de la zona portuaria al tráfico no es una medida adecuada para reactivar la actividad en la zona, una necesidad que es constatada por el 97 por ciento del total. Además, el 53 por ciento de los encuestados considera que el negocio que regenta se vio afectado por el cierre, cifra que aumenta hasta el 63 por ciento en los locales ubicados en el tramo del Moll de Llevant abierto al tráfico, según refleja una encuesta realizada por el PSOE a 73 negocios y empresas del puerto.

No obstante, el 56 por ciento de los comercios encuestados está de acuerdo con el cierre del puerto de forma consensuada y planificada, cifra que se eleva hasta el 67 por ciento en los comercios ubicados en la zona del Moll de Llevant cerrada al tráfico el año pasado.
El 92 por ciento de las empresas del puerto de Maó rechaza la forma en que el equipo de gobierno de la alcaldesa Águeda Reynés realizó el cierre al tráfico del tramo portuario, lo que según el portavoz del grupo municipal del PSOE, Vicenç Tur, podría condicionar la opinión sobre la peatonalización de la zona. "La falta de planificación, diálogo y consenso del equipo de gobierno ha provocado que la gente que estaba en contra se ratificase en el no, mientras que muchos de los que estaban a favor cambiasen de opinión", ha asegurado Tur.

El 79 por ciento de los comercios se posiciona en contra del cierre del tráfico en los muelles de Llevant y Ponent, e incluso el 64 por ciento rechaza mantener un carril de tránsito en un sola dirección. No obstante, esta última posibilidad cuenta con más adeptos en el tramo portuario que el pasado año fue cerrado al tráfico.

Sobre la posibilidad de que los residentes y personas que se dedican al sector náutico puedan acceder a la zona viaria restringida, el 73 por ciento de los comercios considera que sí. En este sentido, tres cuartas partes de los encuestados opina que los dos colectivos deberían estar identificados con una tarjeta acreditativa. Sobre el particular, Vicenç Tur apunta que "si lo sumamos a las observaciones escritas que han realizado los encuestados, vemos que estas valoraciones responden a la sensación de que el tránsito de algunos vehículos por la zona cerrada al tráfico en verano fue uno de los aspectos de mayor descontrol.

La encuesta realizada por el PSOE también incide en la problemática del aparcamiento en la zona portuaria. Así, el 63 por ciento de los comercios cree que debe modificarse el sistema actual de aparcamiento, cambio que respalda el 79 por ciento en el caso de comercios establecidos en el tramo del Moll de Llevant cerrado al tráfico el pasado año. Además, el 84 por ciento de los encuestados subraya la necesidad de disponer de un mayor número de aparcamientos. En este tema, Tur señala que existe una sensación un tanto contradictoria. "Hay mucha gente que considera que el aparcamiento en línea de coches frente a los bares y restaurantes tiene una incidencia negativa, pero en cambio en la zona donde hay más tiendas les conviene que los aparcamientos estén frente a la fachada", asegura.

La conexión del puerto con el resto de la ciudad también ha sido tratada en la encuesta, que refleja de forma mayoritaria la ineficacia del tren turístico para enlazar las dos zonas. Así, el 85 por ciento considera que no es el medio de transporte más adecuado, opinión que alcanza el 91 por ciento en los comercios ubicados en la zona restringida el pasado verano.
Encuesta
La encuesta realizada por los miembros del grupo municipal del PSOE contiene 16 preguntas y fue entregada a 90 negocios y empresas establecidas en el puerto de Maó, aunque finalmente se ha realizado el estudio con la participación de 73 comercios. La encuesta distingue a los establecimientos ubicados en el Moll de Ponent y Moll de Llevant, éste último desglosado en los tramos abierto al tráfico y en el que se restringió el paso a los vehículos.