Actuación. Esta imagen, tomada desde el Ayuntamiento, enseña la franja del antiguo adoquinado que coincide exactamente con el trazado de la calle Victory - Javier

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Recuperar patrimonio y arreglar espacio público. Estos son los dos objetivos que han llevado al Ayuntamiento de Es Castell a actuar en la Plaça Esplanada. Las obras, que ya llevan varias semanas desarrollándose, consisten en la sustitución del pavimento actual por unas antiguas losas de piedra del 1891 que fueron extraídas en su momento de la cantera de Alcalfar y que servían de acera ante el edificio del Ayuntamiento.

La actuación ha sido incluida en la convocatoria del Plan Insular de Cooperación y adjudicada a la empresa Hijos de Jaime Salvador por un importe aproximado a los 30.000 euros.

Este empedrado que el Ayuntamiento recupera se encontraba guardado en el Cuartel de Ingenieros. El Consistorio consideró interesante aprovechar este patrimonio histórico y "sentimental" para los habitantes del núcleo para mejorar el pavimento de la Plaça Explanada. Y es que, según señala el alcalde, Lluís Camps, el suelo padecía deficiencias debido a que intercalaba dos tipos de material ocasionando algún que otro tropiezo además de acumular agua y formar charcos. "Era necesaria una actuación urgente con el menor coste posible" señala Camps y agrega que "no tener que comprar un adoquinado nuevo ha reducido considerablemente el presupuesto de la obra".

El empedrado se ubica exactamente en el mismo lugar donde se encontraba antiguamente y da continuidad al trazado de la calle Victory.

La primera fase de las obras se centra en las inmediaciones del Ayuntamiento (como se ve en la imagen) y supone una actuación de aproximadamente 200 metros.

La segunda fase, que arrancó la pasada semana, se ubica justo en la entrada de la calle Victory y supone la sustitución de otros 100 metros de pavimento.

Las dos zonas donde se coloca este empedrado se combinarán con unas franjas de árboles así como con una zona ajardinada -apadrinada- y césped para dotar de color este punto de encuentro de la ciudad.

Además, con posterioridad a estas obras, el Ayuntamiento prevé actuar en la pista de petanca que, debido a su inutilización, se convertirá en una zona ajardinada, probablemente también apadrinada.

UN POCO DE HISTORIA
Durante muchos años la Plaça Explanada no fue más que un descampado de tierra y piedras. Las primeras obras públicas comenzaron en 1811, fecha de inicio del empedrado de las aceras de los cuarteles. En 1888 se acordó la siembra de árboles delante de las casernas.

Tal como recoge el archivo municipal, fue en 1889 cuando se acordó la construcción de un canal empedrado de dos metros de ancho que atravesara la plaza en dirección a la calle de la iglesia. En 1891 ya estaba finalizado el mapa y se remitía para su aprobación al general gobernador militar. Las obras se adjudicaban en 1891 por la comisión de obras públicas al constructor local Juan Marí Ferrer.

El canal fue acabado en marzo de 1892. Solo quedaba, entonces, terminar los contornos. Este adoquinado ocupó la Plaça, probablemente hasta 1969 cuando se llevó a cabo una reforma general del espacio.